En el Senado volvieron a aplazar la creación de un código de ética parlamentaria que ya lleva cajoneado varios años, y que incluso ya cuenta con algunas modificaciones.
Son varios los proyectos que se habían presentado en torno a este punto, pero fue Derlis Osorio el que había pedido que se trate su propuesta.
La única comisión asesora que dictaminó por la aprobación de la normativa fue la de Peticiones.
Aún no dieron su veredicto sobre el tema Asuntos Constitucionales y Legislación.
El que volvió a pedir un aplazamiento esta vez fue el cartista Sergio Godoy por un plazo de 21 días.
La presidenta de la Comisión Parlamento Abierto del Senado, Blanca Ovelar, quien con algunos de los miembros planteó cambios a la propuesta, no se opuso al pedido de postergación.
Supuestamente, el argumento que trascendió es que sus colegas no tuvieron acceso a las modificaciones por lo que no pudieron estudiar.
Sin embargo, cuando se trata de algún proyecto que es de interés de algunos senadores o de la mayoría rápidamente suelen darle trámite.
La propuesta sobre el código de ética incluye una lista de normas que los senadores tienen que cumplir, y que de lo contrario están expuestos a ser sancionados.
El proyecto inicial de Osorio, solamente planteaba amonestación verbal y por escrito, y como máximo una suspensión por 60 días, sin goce de dieta.
Ovelar había informado días atrás que además de estas sanciones, también se agregaba la pérdida de investidura parlamentaria.
Este último punto es lo que podría generar nuevamente conflicto entre los senadores.
Como antecedentes se puede mencionar, que justamente el proyecto volvió a ser desempolvado luego de que se hayan organizado una serie de escraches tras denuncias de corrupción, y como consecuencia se dieron renuncias en Diputados y Senado.
“Hay demandas crecientes por problemas de ética que conocemos de muchos parlamentarios, y eso hace que sea un desafío enorme proponer un código”, había indicado la senadora Ovelar.
Además, había agregado que los senadores, a quienes va dirigido este código, tendrían que tener bien definido tanto su compromiso como su responsabilidad.
Dentro de la normativa, están establecidos una serie de conductas y comportamientos que tienen que cumplir cada uno de los senadores respetando la investidura.