En el marco de los festejos por los 208 años de independencia nacional, este miércoles fueron habilitados oficialmente los adoquines de la calle El Paraguayo Independiente, frente al Palacio de López.
Se inauguró en un acto oficial donde estuvo el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, y otras autoridades del país.
Esto fue criticado por el arquitecto y escritor Jorge Rubiani, quien sostuvo en contacto con Monumental 1080 AM que no hay porqué ufanarse de esta acción y mucho menos prestarle importancia, ya que no son “100 metros de recuperación como tal”.
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“No hay motivo, sino que para lamentarse por ese adoquinado, en vez de inaugurarlo pomposamente”, lanzó.
Señaló que el Gobierno debe atenerse a lo que Paraguay firmó en materia de conservación patrimonial, y que lo impulsado por el Estado, es exactamente lo que no debe hacerse.
“No debe incorporarse ninguna intervención que parezca lo que no fue, cuando sabemos que hace poco (las piedras) se sacaron de la cantera”, remarcó.
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Sostuvo que no se tuvo la voluntad de investigar a dónde fueron a parar los adoquines que fueron sacados en la época de Andrés Rodríguez, unos días después de la noche de la Candelaria, que terminó con la dictadura de Alfredo Stroessner, y poco antes del desfile del 14 y 15 de mayo de 1989.
“Es fácil verificar que antes de 1906 los adoquinados no estaban y en 1911 –que se publicaron en los álbumes gráficos del Paraguay– los adoquines sí ya estaban, de manera que data desde esa época, y fueron testigos de grandes acontecimientos del país, además de la asunción de los presidentes”, citó Rubiani.
El arquitecto aseguró que bajo ningún manual de preservación de la historia se admite que un patrimonio se reconstruya con materiales nuevos.
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Sin embargo, manifestó que algunos dicen que las piedras fueron traídas en su momento de Hamburgo, Alemania, y otros de Róterdam, Países Bajos, y que solamente los adoquines que están entre las vías son las antiguas.
La otra parte de piedras originales mencionó que están al pie de una estatua de López que había sido trasladada por la Municipalidad de Asunción. Pero además hay más, cuyo destino se desconoce. “Hay que preguntarle a (la ex intendenta) Evanhy de Gallegos a dónde fueron a parar esos adoquines”, refirió.
Los trabajos de recuperación después de 30 años fueron realizados por técnicos del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), la Presidencia de la República, la Municipalidad de Asunción y la Secretaría Nacional de Cultura (SNC).