Las octavas elecciones generales de la era democrática en Paraguay eligieron como nuevo presidente de la República al candidato de la Asociación Nacional Republicana (ANR), Santiago Peña, quien alcanzó una histórica diferencia de votos, solamente superada por el general Andrés Rodríguez en 1989.
El presidente electo logró una gran diferencia de 15,26% del total de los votos (460.597 votos) sobre su principal adversario, Efraín Alegre, quien reconoció la derrota y felicitó a Peña, señalando la necesidad de mayor unidad en la oposición.
Los colorados celebraron por su parte la gran victoria de Peña y sus demás candidatos, quienes lograron hasta mayorías propias en ambas cámaras del Congreso y 15 de 17 gobernaciones en todo el país.
Los números. Peña alcanzó una aplastante victoria con el 42,74% de los votos (1.292.079 votos), según el conteo del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), al 99,94% de los votos procesados.
A gran distancia quedó el principal oponente de Peña, el candidato liberal de la Concertación por un Nuevo Paraguay, Efraín Alegre, quien logró apenas el 27,48% de los votos (830.843 votos), lo cual implica hasta una caída de la elección que hizo en los comicios del 2018, donde obtuvo el 43,04% de los votos (1.115.464 votos). Alegre suma su tercera derrota como candidato a presidente, y empata en estadística al histórico dirigente Domingo Laíno.
La sorpresa. En tercer lugar quedó el candidato a presidente de la República por el Partido Cruzada Nacional, el ex senador Paraguayo Cubas, quien sorprendió con un 22,91% de los votos (692.663 votos), casi empate con Alegre, y logró meter a varios de sus candidatos al Congreso y otros lugares.
Cubas no logró ser presidente de la República, pero crece en su figura como candidato para el 2028, y su grupo político alcanzó varias bancas en el Congreso Nacional (ver páginas 6 y 7), entre otros lugares.
De los demás diez candidatos que se presentaron, ninguno alcanzó siquiera el 2% de los votos, entre ellos Euclides Acevedo, ex canciller y ex ministro del Interior del Gobierno actual, quien se postuló con el senador Jorge Querey como candidato a vice.
Lo mismo ocurrió con el ex arquero de la selección paraguayo José Luis Chilavert, y otros candidatos que se presentaron y no levantaron vuelo en la intención de votos durante el proceso electoral.
El número total de votos computados, con el 99,94% de las mesas escrutadas, fue de 3.022.946, de los cuales, 13.240 fueron anulados y 68.242 fueron en blanco. La participación fue del 63,24%, faltando computar apenas 613 votos en el sistema de conteo rápido de la Justicia Electoral.
La jornada. Las elecciones generales de ayer contaron con la particularidad del uso de las máquinas de votación y el voto preferencial, que ya se habían aplicado en las elecciones municipales y en las internas partidarias de diciembre pasado.
La jornada se inició a las 07:00 y se desarrolló hasta las 16:00. A diferencia de comicios anteriores, el proceso en las filas fue mucho más lento, al punto que mucha gente quedó dentro de los locales votando luego de que se cerraran las puertas.
También se dieron denuncias sobre personas que acompañaban a otras al momento de votar, lo cual viola el secreto del voto y configura el delito de inducción al voto, hecho que se había denunciado ya en las municipales pasadas.
Tampoco faltaron las grescas entre grupos políticos contrarios, ni las tradicionales compraventa de votos, según se pudo observar en varios videos en redes sociales.
Referencia. En los comicios del 2018, Mario Abdo ganó por el 3,38% de diferencia; antes Cartes había logrado, en el 2013, una diferencia de 8,57% de los votos.
Lugo había ganado en el 2008 con 10,12% de diferencia; Nicanor Duarte, en el 2003, con 13,15% a favor; Raúl Cubas Grau con 11,47%, en 1998; y Wasmosy con 8,58% de diferencia, en el año 1993. Rodríguez había logrado una diferencia del 55,61% a favor en 1989, año de la caída de la dictadura stronista a través del golpe de Estado que él mismo protagonizó.
Cartes expresó respaldo de ANR
Durante la celebración de la victoria electoral, el presidente del Partido Colorado, Horacio Cartes, le expresó al presidente electo, Santiago Peña, que la nucleación partidaria será su mejor herramienta de gobierno.
El festejo colorado se realizó en la explanada de la ANR mientras seguía el conteo del sistema de Transmisión de Resultados Electorales.
“Estoy superado por la emoción. Lo que nuestro Partido Colorado nos ha hecho sentir hoy es inimaginable. Es la seguridad de que Paraguay está en buenísimas manos”, recalcó destacando las figuras de Peña y el vicepresidente Pedro Alliana.
Cartes mencionó que ganaron una fuerte batalla electoral dejando atrás al candidato de la Concertación Nacional para un nuevo Paraguay, Efraín Alegre.
“Creemos que el churro somos nosotros, el churro es el Partido Colorado a través del pueblo colorado”, sostuvo.
Cartes, acusado de ser significativamente corrupto por el gobierno de Estados Unidos, mencionó que las experiencias que les han tocado vivir. “Desde esta nucleación política le pido luz todas las mañanas y noches. Quiero ser herramienta de ustedes. Las luchas de ustedes son mis luchas. Estás seguro de que el Partido Colorado será tu mejor herramienta”, sentenció.
Los dirigentes colorados que se congregaron hasta la explanada de la ANR ovacionaron a Cartes vociferando que “el pueblo está contigo”.
Cartes volvió a aparecer en el último tramo de la campaña electoral, compartiendo escenario con Peña.
Abdo felicitó a su sucesor vía Twitter
El presidente Mario Abdo Benítez felicitó al presidente electo, Santiago Peña, tras los resultados electorales. “Felicitaciones al pueblo paraguayo por su gran participación en esta jornada electoral y al presidente electo Santiago Peña. Trabajaremos para iniciar una transición ordenada y transparente, que fortalezca a nuestras instituciones y a la democracia del país”, afirmó.