El hecho lo había protagonizado un solitario ladrón que las amenazó a punta de un cuchillo.
Ese incidente provocó una significativa movilización policial que no pasó desapercibida por los visitantes.
Los miembros de la fuerza pública se encuentran en el acceso principal y en las zonas donde “desaparecieron” las rejas que de alguna manera buscan resguardar el lugar, informó Telefuturo.
Según los intervinientes, habrá patrullas preventivas dentro del parque y los agentes podrán pedir el número de cédula de identidad, a fin de garantizar la seguridad de sus visitantes y funcionarios.
Sin embargo, los hechos de inseguridad son una constante en el parque y zoológico, donde presuntos adictos o delincuentes siguen robando las rejas y a ciudadanos que realizan actividades físicas o recreativas.
Por orden administrativa del Jardín Botánico y Zoológico, las víctimas del último asalto no dieron declaraciones ni detalles a la prensa.