Alfredo Manuel cenaba en la cocina de su casa con su concubina el pasado viernes a las 20.30, en el barrio San Miguel de Cambyretá, del departamento de Itapúa, cuando un desconocido ingresó y le disparó.
Según el informe emitido por la Jefatura de Policía de Itapúa, el autor del crimen llevaba puesta una camiseta de un club de fútbol de Argentina y estaba a bordo de una motocicleta.
Se sospecha de un encargo, ya que el desconocido no se llevó nada de la casa y tampoco atacó a la mujer.
El autor del crimen utilizó un revólver calibre 38 según los datos recabados. La víctima fue auxiliada por bomberos voluntarios e ingresó de urgencia al Hospital Regional de Encarnación donde se constató su deceso a causa de más de 4 impactos de bala que recibió especialmente en la zona de la espalda.
AMEZ, como era mencionado por los medios cuando lo condenaron por triple homicidio -porque tenía 14 años- confesó en 1993 haber asesinado María Angélica Ramona de Rivelli y a los dos hijos de esta, María Lourdes Rivelli Torres y José Luis Rivelli Torres. A la segunda mujer también la violó.
Elizeche y una hermanita que en ese entonces tenía 10 años, vivían en la casa de los Rivelli en Asunción, pero el adolescente confesó que los asesinó por venganza, ya que lo habían despedido.
Desde entonces y bajo lo establecido por el Código de la Niñez y Adolescencia, Alfredo fue condenado a 12 años de cárcel y fue puesto en libertad en el 2005. Luego de esto, inició una nueva vida en Cambyretá, donde se dedicaba a elaborar y vender chipa y a formar una familia.