El aspirante a policía Hugo Daniel Domínguez Zaracho (20), oriundo de Coronel Oviedo, fue sorprendido por un infarto mientras realizaba ejercicios de entrenamiento el 23 de setiembre. Sus padres recibieron una llamada desde el Colegio de Policía de esa ciudad, comunicándoles que su hijo sufrió un desmayo.
Ante la gravedad de salud, lo trasladaron hasta el Hospital Rigoberto Caballero, en Asunción, lugar al que llegaron sus padres y encontraron un desgarrador panorama. Hugo Daniel habría sufrido un infarto, por lo que estuvieron reanimándolo por más de 40 minutos, lo que motivó su ingreso a terapia intensiva, donde permaneció por 44 días y salió luego en estado vegetativo.
Lea más: Comandante de la Policía no sabía sobre plan de “reestructurar” cooperación con EEUU
Desde que todo pasó, sus progenitores, Diego Domínguez y María Ana Zaracho, no lo dejaron solo en el hospital, renunciaron a sus trabajos y su vida normal, obligados a dejar a sus otros hijos menores en la casa –una de ellas hasta tuvo que abandonar sus estudios– para venir a instalarse en el albergue del hospital.
Ellos escucharon varias versiones lo que le ocurrió a Hugo. Desde la Academia de Policía les comunicaron telefónicamente que fue un desmayo, aunque algunas madres de sus camaradas le comentaron que ese 23 de setiembre el joven fue “descuereado” cuando ya se estaba sintiendo mal.
“No nos pueden entregar a nuestro hijo así. Pedimos que se hagan responsables de lo que le pasó a nuestro hijo mientras se estaba ejercitando en la Academia. A consecuencia de esto perdimos todo”, exclamó la madre, desesperada.
Lea más: Aspirante a policía sigue grave y su familia reclama apoyo de las autoridades
El informe médico oficial que escucharon mencionaba como diagnóstico una neumonía bilateral que le ocasionó el infarto, y como consecuencia de eso quedó en estado vegetativo de manera irreversible.
Actualmente, sigue internado en el hospital en una sala común, pero con muchos cuidados especiales que van desde su alimentación hasta sus medicamentos.