“La propiedad más extraña de esta señal nueva es que tiene una polarización muy alta”, indicó Ziteng Wang, autor principal del artículo y estudiante en la Escuela de Física de la Universidad de Sydney, en Australia.
Esto significa, según el artículo, que su luz oscila “solo en una dirección, pero esa dirección rota con el tiempo”.
“El brillo del objeto también varía sustancialmente, por un factor de 100, y la señal se enciende y se apaga al parecer al azar”.
El nombre técnico dado a las ondas es ASKAP J173608.2-321635, y la señal se detectó seis veces entre enero y setiembre de 2020 y luego reapareció el 7 de febrero de este año.
Puede leer: Científicos logran fechar antiguas estrellas de la galaxia
El centro de rotación de la galaxia alberga un agujero negro de gran magnitud en su centro, y en la región hay densas aglomeraciones enormes de estrellas que incluyen gigantes rojas, supergigantes, gases extremadamente calientes y fuentes abundantes de señales de radio.
Muchos tipos de estrellas emiten luces variables en toda la gama del espectro electromagnético, y con los avances en radioastronomía el estudio de objetos variables o transitorios es un campo extenso para el estudio del universo.
“En principio pensamos que podría ser una púlsar –un tipo de estrella muerta muy densa y que rota– o también un tipo de estrella que emite enormes llamaradas solares”, señaló Wang.
El equipo internacional, del cual Wang forma parte, incluye científicos de Australia, España, Alemania, Estados Unidos, Canadá, Sudáfrica y Francia, descubrió el objeto mediante el radiotelescopio ASKAP en el este de Australia.