En una emboscada mortal con explosivos fue sorprendido un contingente operativo de militares de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) que iban en un móvil oficial por un camino próximo a la estancia La Yeya, en el Departamento de San Pedro, cerca del límite con el Departamento de Amambay.
En el ataque perdieron la vida tres agentes militares, un conductor y dos acompañantes, confirmó el teniente coronel Luis Apesteguía, vocero de la FTC. Son el sargento primero de Infantería Lauro Ramón Monzón Acosta; el sargento primero de Material Bélico Mauricio Pérez Paredes y el sargento primero de Infantería Eulalio Espinoza.
Nueve uniformados estaban patrullando la zona en dos vehículos. En uno iban seis personales y en otro los tres que fallecieron.
Apesteguía calificó de “cobarde el ataque” contra sus camaradas.
explosivos. Según los primeros reportes de la investigación, un grupo de militares de la FTC se estaba trasladando a bordo de dos camiones cuando explotó una bomba debajo de uno de ellos. Que con la detonación incluso se habría derrumbado un puente cuando los uniformados pasaban por el lugar.
El atentado ocasionó la muerte de los tres militares, mientras que sus camaradas que iban en el otro vehículo realizaron rastrillaje y disparos hacia una zona boscosa.
Doña Obdulia Florenciano informó que su hijo Jacinto, de 22 años, hermano de Edelio, es militar, integrante de la FTC y que estaba en la zona del ataque, pero le confirmaron que se encontraba bien.
En la misma zona se produjeron los secuestros de los colonos Franz Hieber Wieler, el 21 de agosto del 2017, y Bernahar Blatz Friessen, el 1 de setiembre de ese mismo año. También existen antecedentes de ataques con quema de retiros de estancias, quema de tractores y otros tipos de amedrentamientos llevados a cabo por miembros de grupos armados.
antecedente. El 27 de agosto del 2016, en un camino vecinal entre los Núcleos 6 y 7, de Arroyito, Departamento de Concepción, a las 09:00, fue atacado también con una bomba un camión militar de la Base Nº 2 de Área Pacificación Militar, ocasionando la muerte de ocho militares que transportaban insumos de las Fuerzas Armadas.
No se pagó rescate
El piloto Juan Carlos Olmedo agradeció ayer a las personas que se preocuparon por su bienestar durante el tiempo que estuvo secuestrado, y a todos aquellos que gestionaron por su pronta liberación. Además, confirmó que no se realizó ningún tipo de pago por su rescate. “Quiero agradecer a la gente que nos apoyó en todo momento. No tengo palabras para agradecer todo el apoyo a mi familia, mis compañeros. Gracias a Dios ya estamos de vuelta todos juntos”, dijo Olmedo en guaraní.