“Esto se debe, principalmente, a una reducción durante el año en el número de actos de estigmatización emitidos a través de medios de comunicación, plataformas digitales y redes sociales”, indicó la organización en su informe anual.
En 2022, el CDJ registró 246 casos de estigmatización, 95 de intimidación y hostigamiento, 34 amenazas, 8 ataques digitales, 4 casos de judicialización, 2 detenciones arbitrarias y otros 7 sin especificar. Asimismo, reportó 267 ataques contra oenegés (67%) y 129 (33%) fueron cometidos de manera individualizada en contra de personas defensoras de derechos humanos. El CDJ indicó que el año pasado estuvo marcado por la continuidad de las restricciones al “espacio cívico y democrático” del país, donde la “política de criminalización, represión y control generó graves afectaciones principalmente a los derechos a la asociación, reunión, manifestación, expresión, opinión y defensa de derechos humanos”. EFE