Durante la pandemia del Covid-19 se duplicó considerablemente el aumento de consultas de pacientes que padecen problemas para conciliar el sueño, debido a varios factores, como la depresión, el estrés, entre otras secuelas, en el funcionamiento del organismo que genera el coronavirus.
Así también una de las secuelas pos-Covid es el daño que se genera en los pulmones, por ende, el nivel de oxígeno disminuye para llegar al pulmón y por ese motivo las personas cuentan con dificultades respiratorias a la hora de dormir.
La sicóloga clínica Carmen Benegas mencionó que aumentaron los casos de personas con trastornos de sueño en la pandemia e instó a la ciudadanía a no automedicarse.
“El estrés, la depresión y esos trastornos conllevan a la falta de sueño. Uno de los síntomas de la depresión es el insomnio, el olvido y además una tristeza profunda, a veces una persona está triste de manera normal, pero si esa tristeza se da de forma continua ya nos tiene que llamar la atención. Además de otros síntomas, como de no querer salir de la cama y no querer realizar ninguna actividad. En mi consultorio tengo muchísimos casos de depresión y estrés en la pandemia, especialmente infantojuveniles, es decir, niños y adolescentes. También hay personas adultas que salieron de su rutina, anteriormente la gente salía a trabajar, con el encierro y sumado a las personas que tuvieron fallecimiento de sus seres queridos, con todo eso se incrementó la tasa de depresión, además del problema económico, ya que muchas personas perdieron sus trabajos”, señaló.
Destacó que automedicarse es un craso error; primero hay que acudir con un médico clínico para que le diga con qué especialista debe derivar el paciente. “La medicación para conciliar el sueño es delicado, no es que cualquier persona puede consumir lo mismo, no porque a una persona le vino bien un medicamento le puede recomendar lo mismo a otra persona, porque se debe ver si tiene hipertensión, diabetes, anemia y miles de problemas que solamente un médico debe recetar, ya que podrá saber cuál medicamento para dormir se puede consumir”, refirió.
Asimismo, Benegas mencionó las consecuencias de una automedicación en el organismo. “Una persona puede generar adicciones con los fármacos y también otros problemas de salud como, por ejemplo, el alcohol u otras drogas. Estos son depresivos del sistema nervioso central y pueden matar neuronas, entonces a consecuencia de ello se puede derivar a otros trastornos neurológicos más tarde, por ejemplo, el alzhéimer no se sabe exactamente la causa, pero podría ser a raíz de una mala medicación con depresivos del sistema nervioso”, destacó.
SECUELAS FÍSICAS
Por otra parte, la experta destacó que el Covid además de generar problemas sicológicos que generan problemas para dormir, también se presentan complicaciones, debido al daño causado por el virus en el pulmón, lo cual el paciente debe acudir a consultar con un clínico y realizarse chequeos pos-Covid.
“Otra de las secuelas pos-Covid son las dificultades respiratorias; hay personas que al acostarse sienten que no pueden respirar, ya que el oxígeno no llega bien a los pulmones, si el pulmón está dañado por supuesto que se tienen dificultades para dormir, además que hay enfermedades de base como, por ejemplo, la apnea, que es el trastorno del sueño, que si se tiene como enfermedad de base, eso junto con el Covid, agrava esa situación y por ende, es muy probable que se presente esta dificultad pos-Covid en las personas”.
Indicó que la saturación de oxígeno baja con el sueño y más aún si se tienen problemas en los pulmones y se encuentran dañados por el virus.
El sueño es fundamental para recuperarse tanto física como mentalmente, incluso también la falta de sueño puede derivar en trastornos neurológicos con el correr del tiempo si no se soluciona de forma precoz”, aseveró la sicóloga.