El plazo de ejecución de las tareas es de 90 días, por lo que se espera que para mediados de setiembre todo el sistema ya esté en funcionamiento, según informó ayer el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). Tendrá un costo de G. 7.220 millones.
La cartera resaltó que una de las ventajas que ofrece esta tecnología es su autonomía, es decir, cada poste instalado a ambos lados de la autopista Ñu Guasu tendrá su propia batería inteligente y su propio panel solar. De esta manera se evita que un mal funcionamiento o falla afecte a todo el sistema.
Las piezas que componen el kit de instalación, como la columna metálica, placa de fundación y brazos de iluminación, fueron hechas en Paraguay, mientras que los paneles solares, las baterías inteligentes y el artefacto de iluminación led fueron importados de China por la contratista. Por otro lado, la batería inteligente permite autorregular la intensidad de la iluminación de acuerdo con las condiciones del clima y la hora, teniendo una autonomía de hasta 14 horas diarias.
Vale señalar que todo el sistema de iluminación tendrá una garantía de tres años y que la vida útil de estos aparatos es de diez años aproximadamente. Según estudios, la iluminación solar al ser independiente de la red eléctrica, a parte de garantizar su funcionamiento incluso durante los apagones, disminuye los costos de operación porque se trata de luces dependientes de la energía térmica dada por el sol, que almacena tanto de ella como se pueda durante el día. Con esto se reducen las posibilidades de sobrecalentamiento, así como su mantenimiento en comparación con luminarias convencionales.
Por esta razón la inversión en estos equipos no difiere mucho de las luces convencionales que funcionan a energía eléctrica. De la misma manera, dado que los sistemas solares no tienen cables externos, el riesgo de accidentes y robos se minimiza considerablemente. A esto se suma que son respetuosos con el medioambiente, eliminando así su contribución de huellas de carbono.