La cooperación de la CAF en materia de electromovilidad, el financiamiento de buses eléctricos, flotas de vehículos livianos eléctricos y la adquisición e instalación de sistemas de cargas rápidas en distintos puntos del territorio nacional, fueron algunos de los temas abordados en la reunión. Una de las metas del Estado es que para el 2023, entre el 10% y el 20% del transporte público y los vehículos estatales sean movidos a energía eléctrica.
Lorena Méndez, explicó que la asistencia crediticia del CAF, en el marco del Programa de Movilidad Eléctrica y Transporte Bajo en Carbono (E-Motion), será abonada en 15 años, en un fondo compartido entre Paraguay, Uruguay y Panamá.
El dinero será utilizado para la inclusión de buses eléctricos de servicio público, así como paradas de abastecimiento.
Potencial
“Vemos que Paraguay, desde la perspectiva de la generación de energías eléctricas, tiene un gran potencial para la implementación de proyectos de electromovilidad, justamente por las características de la matriz de generación, casi el 100% renovable”, dijo, por su parte, César Vargas, ejecutivo del organismo multilateral.
La movilidad eléctrica permitirá a los países sentar las bases para descarbonizar el sector, así como mejorar la calidad del aire.