Un correo electrónico de “alto voltaje” lo sacó del semianonimato en el que se desarrollaron sus casi 40 años en el Paraguay. Sin embargo, Rafael Eduardo Avilés Lambie tiene un pasado vinculado a la violencia en Chile, su país de origen.
Según el expediente de la investigación del asesinato del ex comandante del Ejército de Chile, general René Schneider, Avilés estuvo involucrado en dicho acto ocurrido el 23 de octubre de 1970, en Santiago de Chile.
El asesinato del general Schneider fue realizado como un intento para evitar que Salvador Allende sea proclamado presidente de Chile, luego de ganar estrechamente las elecciones de 1970.
El atentado fue perpetrado por el grupo Patria y Libertad, del cual supuestamente era parte Avilés.
El Parlamento debía confirmar a Allende en la presidencia, lo cual ocurrió, a pesar del atentado que pretendía crear el caos y evitar así la subida de un comunista al poder.
Schneider era considerado un militar institucionalista, al igual que el general Carlos Prats, asesinado hace 35 años en Argentina.
En los reportes del caso, específicamente en la Revista de Derecho y Jurisprudencia y Gaceta de Tribunales, se vincula a Avilés con el asesinato de Schneider.
Luego del atentado, Avilés se trasladó el 12 de noviembre de 1970 a Argentina, y de allí pasó al Paraguay en enero de 1971, obteniendo documento paraguayo en marzo de ese mismo año. Su número de cédula paraguaya es 585.753.
También un ex diplomático chileno, Eduardo Rodríguez Guarachi, lo cita como vinculado a la muerte del general Schneider, en su libro Chile - Argentina. Más Allá de sus Fronteras: Crónicas de un Diplomático.
APUESTA. En dicha publicación, Rodríguez Guarachi relata que se había encontrado con Avilés y Diego Izquierdo en Buenos Aires, Argentina, y que estos le habían apostado 5 mil dólares que la Democracia Cristiana chilena no iba a dar su apoyo para que Allende asuma la presidencia.
Según Rodríguez, nunca cobró la apuesta y más tarde se enteró de que los tres citados estuvieron involucrados en el atentado y asesinato del general Schneider.
Según fuentes periodísticas de Chile, Avilés es un prófugo de la Justicia en Chile, y se pidió su extradición, en un fallo judicial de 1978, repitiéndose el pedido en el año 1983. Sin embargo, según fuentes de la Interpol paraguaya, no existe tal pedido de extradición.
EL PEDIDO. El pedido de extradición de Avilés fue aprobado por la Corte Suprema de Chile, según un escrito publicado en la Revista de Derecho y Jurisprudencia y Gaceta de los Tribunales, Tomo LXXX, Nº2 Mayo - Agosto de 1983, Volumen 90, Números 1-2, Página 50 - 51.
El escrito ordena que se remitan los datos a la Cancillería, para su tramitación, vía diplomacia.
REPERCUSIÓN INTERNACIONAL
Varios medios internacionales de prensa se hicieron eco de la propuesta hecha por Avilés, de armar grupos anticomunistas en Paraguay.
Las Últimas Noticias (Chile) y El Nuevo Herald (EEUU) en su versión español se refirieron a la publicación lanzada por Última Hora.
También Latercera.com, de Chile, reproduce las declaraciones publicadas por ÚH el domingo pasado, así como parte del email que Avilés reconoció haber enviado a los socios de la ARP, filial San Pedro, en el que insta a la formación de grupos civiles y la compra de armas pesadas para combatir a “comunistas”.
La investigadora Pascale Bonnefoy titula un artículo en su blog de globalpost “Chileno fugitivo propone la creación de grupos armados en Paraguay”. En dicho sitio asegura que Eduardo Avilés es un prófugo de la Justicia chilena por el caso del asesinato del general René Schneider, donde también está involucrada la agencia CIA de los EEUU.