Los pobladores acusan la falta de asistencia por parte de las autoridades. Mientras todos los esfuerzos están concentrados en las familias desplazadas por la crecida del río Paraná, al menos medio centenar de familias tiene sus cultivos dañados por el furioso temporal, según reveló Beatriz Rodríguez, pobladora afectada y líder de un gremio de mujeres emprendedoras de la zona.
“Nosotros tenemos nuestro canal de agua alrededor de nuestras casas, falta limpieza de esos canales. A causa de la intensa lluvia se llenó todo y mato nuestro ganado, pollitos, chanchitos. El campo comunal está bajo agua, tenemos nuestras vacas en la altura, otros lo llevamos cerca de la ruta, las autoridades aún no vinieron a vernos”, afirmó.
Rodríguez indicó que en la zona viven 250 familias, de las cuales 60 son productores afectados por el temporal. Además, cinco casas quedaron bajo el agua. “Como comunidad nos estamos apoyando prestándonos aceite, sal, yerba y ya no tenemos”, comentó.

La mujer dijo que tienen mucha gente de la tercera edad y niños en la zona que precisan ayuda. Además, con la pérdida de sus cultivos, requieren la provisión de víveres. “Necesitamos que nos asistan, que vengan a vernos, porque después de esto se va a sentir verdaderamente la falta de producción”, insistió. VR