En el último mes del 2024 la inflación fue de 0,7%, la cifra más elevada del segundo semestre y una de las más altas del año (solamente por debajo de los registros de enero, marzo y abril). Con esto, la variación del IPC acumulada desde enero alcanzó el 3,8%, levemente por encima de lo previsto por la banca matriz. Para este año el objetivo de variación del IPC pasará a ser 3,5%, con un rango de tolerancia de 2%; lo cual quiere decir que la inflación puede oscilar entre los niveles de 1,5% y 5,5%.
Desde la banca matriz resaltaron que este ajuste tendrá efectos positivos en la economía, como la protección del poder adquisitivo, la menor volatilidad y la reducción de las tasas de interés.
“Este objetivo más exigente implica un fuerte compromiso del BCP con la estabilidad de precios, además de significar un importante paso para que la meta se ubique más cerca de los niveles inflacionarios observados en los países con esquemas de metas de inflación considerados más modernos y responsables de la región y del mundo”, indicaron los técnicos.