Fuente: EFE
Expertos y ciudadanos calificaron así las palabras del primer presidente negro de Estados Unidos, absteniéndose de referirse a ellas de históricas, por lo menos de momento.
El entusiasmo sobre el mensaje de Obama ha sido más notable en el ciudadano de a pie.
Los analistas de la cadena CNN coincidieron en resaltar que el discurso fue preparado y escrito con mucho cuidado, fue “muy audaz” y “fuerte”, rompió con la era de su antecesor, George W. Bush, y transmitió un claro mensaje a los estadounidenses: el de que Obama no encabezará una transición sino una transformación.
El 44 presidente de Estados Unidos advirtió de que la etapa que viene será complicada y por eso dejó claro que “las cosas no van a cambiar de la noche a la mañana”, y que todos tienen que arrimar el hombro para sacar adelante un país aquejado por dos guerras, una profunda crisis económica y una deteriorada imagen en el exterior.
Al mismo tiempo, urgió a los estadounidenses a optar por la “esperanza” y la concordia nacional, mensaje que fue recibido con emoción y lágrimas en los ojos por algunos de los congregados frente al Capitolio, donde se calcula que se dieron cita unas dos millones de personas.
Para Viveka Kgellgren, el discurso de Obama era “esperanzador”, y “digno”, a la vez que las palabras del presidente transmitieron “humildad”, dijo en declaraciones a Efe.
De nacionalidad sueca, pero en proceso de convertirse en estadounidense, esta agente inmobiliaria que lleva ya diez años viviendo en Estados Unidos consideró que lo que hizo Obama fue “preparar al país para los difíciles tiempos que se avecinan”.
Pero al mismo tiempo, “infundió esperanza”. En su opinión, Europa “va a mirar a Estados Unidos de forma completamente distinta” tras este discurso y la llegada de Obama al poder.
La fuerza que transmitió el nuevo presidente lo notó especialmente Jennifer Richer, de 35 años y procedente de San Francisco.
Richer, que trabaja en una organización sin ánimo de lucro, también afirmó que el discurso de investidura “generó esperanza”, pero ella se fue más allá, al afirmar que se siente “rejuvenecida” y “lista para una nueva etapa”.
“El país está listo para hacer borrón y cuenta nueva”, señaló, al resaltar que su parte favorita del discurso fue aquella en que Obama dijo: “Debemos levantarnos, sacudirnos el polvo y comenzar de nuevo la tarea de reconstruir Estados Unidos”.
Por su parte, Trina Allen, una psiquiatra afroamericana de 41 años de Carolina del Norte, calificó el discurso de Obama de “espectacular”. También ella considera que “infundió esperanza”.