18 sept. 2024

Bastón de Stroessner generó bochorno

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Con orgullo. Colym Soroka se estuvo paseando con un bastón, que pertenecía a Stroessner.

GENTILEZA

El colorado Colym Soroka y el liberal Éver Villalba por poco no llegaron a los golpes, ayer, en plena sesión del Senado. Este bochorno se evitó por intervención de otros.

Soroka apareció presumiendo un bastón presidencial que, supuestamente, recibió como obsequio y que habría pertenecido al dictador Alfredo Stroessner, lo que fue considerado una ofensa por Villalba, justo en el día del aniversario del PLRA.

“Vengo de un partido muy democrático, y en el día del liberalismo hablar y tratar de tener ránking, mencionando un regalo que llega hoy a mi oficina, parte de la historia paraguaya”, refirió Colym.

“El Partido Liberal lo único que tuvo es sangre y dolor en el 41. Es un regalo y no hicieron una placa acá, ni una hidroeléctrica. Te beneficiás de una hidroeléctrica que construyó ese general, tal vez”, dijo en defensa de Stroessner. “Sos un maleducado para responder así. Nde kuña’i. Acá o afuera, donde quieras. No soy kuña’i (...)”, desafió, momento en que Villalba se levanta y él también lo hace.

“¿Qué? ¿Te vas a levantar gua’u piko. Aichencháranga (pobre)”, le sigue diciendo Soroka, y lo detienen el presidente Basilio Núñez y otros. Los demás senadores a los gritos piden que ambos se calmen. “En serio, te voy a enseñar a regular tu mandíbula. Ni medio round me vas a aguantar”, sigue Colym contra Éver. Villalba pidió la palabra para hacer su descargo y señalar que le afecta y le daña que presuma ese “bastón bañado en sangre”, y fue interrumpido por Ramón Retamozo, quien presidía la sesión. “Son expresiones machistas y misóginas”, sostuvo el liberal. “Estoy aclarando, dije que a mí me molestaba. Probablemente para él es broma. Es un tipo joven, no conoce la historia, le venera a Stroessner”, dijo sobre Colym.

“Mis parientes fueron perseguidos, esposados. Hoy, todavía no sabemos dónde están los cuerpos de más de 300 paraguayos, y acá vamos a venir a exhibir como trofeo, presumir con alegría”, fue el reclamo del senador.

“Desconoce la historia. Tenemos un Estado que no invierte en educación”, dijo.

“Probablemente, no lo tenía programado él; en el día de la fundación de mi partido, que luchó contra la dictadura, venir a presumir el bastón de Stroessner, bañado en sangre, de tortura. Estamos mal. Exijo respeto a mi partido y a nuestras tradiciones”, sentenció el liberal, luego del momento caldeado con Soroka.

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