La competitividad de los productos paraguayos se ve nuevamente amenazada por la depreciación del peso argentino, que se encuentra en torno al 100% y 120%. Miguel Mora, economista jefe del Banco Central del Paraguay (BCP), reconoció que la diferencia entre esta divisa y el guaraní se venía cerrando, en sus posiciones frente al dólar, pero la tendencia se revirtió por la devaluación del peso.
La inflación en el país vecino, por su parte, se fijó en 54,1% en marzo pasado, pero no ejerce un contrapeso suficiente a la mencionada devaluación de la moneda. En consecuencia, los productos argentinos siguen resultando más baratos en los mercados externos, como el paraguayo.
“Vimos un episodio concreto de lo que ocurre, con el tema del Detave: hay un ingreso de estos productos debido a una mayor competitividad temporal por esa depreciación. Esas presiones, en la medida que persista esa diferencia y se permeen los controles, afecta la evolución de los precios domésticos”, explicó Mora.
El dólar se cotizó ayer a G. 6.280 a la venta en el sector minorista y cerró en 50 puntos por encima del fin de semana último. La divisa continúa así en alza, a pesar de que el BCP inyectó USD 221,2 millones al mercado en abril pasado, a través de ventas compensatorias y complementarias.
El guaraní acumula una devaluación de 14,2% en los últimos 12 meses, por encima de lo que experimentan el real brasileño (11,52%) y el peso chileno (10,17%), pero inferior al 20,9% de depreciación del peso uruguayo, según el análisis semanal de Basa Capital. El peso argentino, por su parte, se depreció en 111,33% en este periodo, agrega la casa de bolsa, y se ve una constante demanda de dólares, con intervenciones del BCP que sirven para mitigar devaluaciones mayores.
Por otro lado, la entidad observa que la liquidez en moneda local empieza a mostrar signos de contracción en el sistema financiero, debido principalmente a la sostenida intervención del BCP dentro del mercado cambiario y el proceso de dolarización desde distintos actores de la economía.