El director del Instituto de Medicina Tropical (IMT), Miguel Cardozo, informó que alrededor de las 8.00 recibieron al paciente lactante que fue trasladado desde el Hospital General de San Lorenzo, más conocido como Hospital de Calle’i.
Al pequeño de un mes le picó un alacrán de la especie Tityus (alacrán rubio), uno de los más peligrosos por su veneno.
“Le estamos haciendo todos los estudios. Los análisis los estamos haciendo minuto a minuto”, indicó Cardozo en comunicación con NPY. Señaló que realizarán el monitoreo correspondiente en un periodo de seis horas.
Lea más: Clasificación de picaduras de alacrán: La clave para recibir o no el antídoto
La madre mencionó que su hijo estaba en su silla (baby seat) y le llamó la atención cuando empezó a llorar. Al levantarlo se percató de la presencia del alacrán.
En ese lapso se determinará si se trata de un caso leve, moderado o grave. Solo en los últimos dos se aplica la antitoxina.
Al ser una picadura leve hay dolor, se forma como un edema o hinchazón, pero no pasa a otros síntomas.
En tanto, cuando se trata de una lesión moderada “tiene manifestaciones un poco más sistémicas; es decir, aparecen náuseas, vómitos, sudoración, una especie de escalofrío”, explicó.
Mientras que la picadura grave tiene manifestaciones sistémicas más complicadas, “como, por ejemplo, más o menos, el corazón puede trabajar muy rápido o muy bajito. Puede haber un edema agudo de pulmón de origen cardiogénico”, señaló el director del IMT.
Desde hace unas semanas se han reportado numerosos casos de pacientes que sufrieron una picadura de alacrán y un niño de 13 años perdió la vida.