En un paso crucial hacia el desarrollo urbano y la mejora de la salud pública, la Municipalidad de Bella Vista, en colaboración con la Junta de Saneamiento Local, ha iniciado la segunda etapa del proyecto de alcantarillado sanitario. La ciudad, conocida como la Capital Nacional de la Yerba Mate, apunta a modernizar su infraestructura con una red cloacal que beneficiará directamente a 2.000 usuarios.
El intendente Euclides de Godois resaltó la trascendencia de esta obra para la comunidad. “Estamos hablando de un paso fundamental para cuidar la salud de la ciudadanía. Es una de las obras prioritarias que estamos encarando junto con la Junta de Saneamiento”, expresó.
La segunda etapa del alcantarillado implica una inversión significativa, respaldada por aportes conjuntos de la Municipalidad y la Junta de Saneamiento. Como parte de este esfuerzo, el intendente entregó recientemente un cheque de Gs. 250 millones al presidente de la Junta de Saneamiento, Jorge Escobar, en cumplimiento del convenio interinstitucional establecido hace más de dos años.
Escobar detalló que la infraestructura eliminará los pozos ciegos, permitiendo a la ciudad expandirse verticalmente con edificaciones de mayor altura, algo esencial para el desarrollo urbanístico. “La obra no solo mejora las condiciones de vida actuales, sino que sienta las bases para un crecimiento sostenible de Bella Vista”, afirmó.
En una reunión con vecinos de los barrios 8 de Diciembre e Inmigrantes, se explicó el alcance del proyecto, los beneficios del sistema y las opciones de financiamiento. La transparencia y el diálogo con los futuros usuarios han sido clave para generar confianza en el impacto positivo de la red cloacal.
La obra, que ya está en marcha con la instalación de tuberías, no solo optimizará el saneamiento, sino que también contribuirá a la salud pública, reduciendo riesgos asociados a sistemas obsoletos y mejorando la calidad de vida en los sectores urbanos.
Bella Vista continúa avanzando con esta infraestructura estratégica, demostrando que el desarrollo urbanístico y el cuidado de la salud van de la mano. Con estas acciones, la ciudad se perfila como un modelo en planificación y gestión sostenible en la región.