Insaurralde agrega, además, de que se trata de un mecanismo mucho más transparente, pues permite un control exhaustivo del momento del cobro y del lugar en donde se utilizaron los recursos. “La mayor eficiencia radica en la eliminación de los intermediarios y hay ejemplos concretos de otros países que demuestran esto, como es el caso de Perú en donde se realizaron las transferencias a las sucursales bancarias, y tienen desde la entidad hasta llegar al cajero que finalmente entrega el dinero en ventanilla. O sea, se incluyen muchos más factores manipulables, que podrían dar lugar a irregularidades durante la efectivización de los pagos”, explica.
Destaca que de hecho, para el pago electrónico también existen intermediarios pero en mucha menor cantidad, lo que implica que no haya tanto factor humano involucrado en la cadena.
En desarrollador también destaca otro punto interesante que implica el mayor acceso de la gente a las billeteras electrónicas y por ende, mayor inserción efectiva al sistema financiero. “Esta es una forma de insertarse al sistema porque muchísima gente nunca había utilizado una billetera y ahora puede aprender y comprobar cómo se utiliza y me parece que ese es un mecanismo poderoso para transferir dinero”, aduce Insaurralde.
Interbilleteras. El sistema electrónico de pagos también evidencia otra necesidad en nuestro mercado, según destaca Insaurralde, y que hace referencia a la interoperatividad entre las billeteras de las diferentes compañías de telefonía celular que existen a nivel local. “Creo que es el momento de hablar de esto, a pesar de que el tema de su uso haya nacido desde el gobierno, pues operar desde las billeteras como cuentas bancarias puede ser muy efectivo para la economía”, señala.
“En otros países como en la Argentina, por ejemplo, tenés Mercado Pago, que es una billetera igual a Tigo Money, con la que se pueden realizar inversiones, obtener microcréditos y otras transacciones similares, por lo que creo que se pueden utilizar a las Empresas de Medios de Pagos Electrónicos (Empes) como alternativas para expandir el mercado financiero”, concluye el desarrollador.
Ya acreditaron a 330.000 personas
Tigo Money acreditó pagos hasta el día de ayer a 330.000 personas, en tiempo récord. En cuanto al consumo, el 88% de las transacciones y el 70% del valor de ventas corresponden a almacenes y minimercados.
El resto corresponde a supermercados. Los pequeños comercios sin POS, vendieron alimentos y cobraron con sus teléfonos celulares, lo que permite llegar a comercios de zonas remotas del país.
A la vez, en alianza con la Red Dinelco, que tiene una importante presencia con sus terminales POS, los beneficiarios pudieron comprar alimentos y combos económicos en los supermercados de sus barrios, en donde se concentró el 30% de las compras. Los Puntos Tigo y la red Dinelco suman 5.700 negocios en el país