El viaje a Asunción fue autorizado para contactos institucionales, con el objetivo de reforzar compromisos bilaterales. El viaje se realizó entre el miércoles 9 y el sábado 12 de abril. Se consultó a la agencia sobre el envío del funcionario a Paraguay, pero no hubo respuesta.
La iniciativa sería un esfuerzo conjunto para reducir los daños tras la filtración de una operación de espionaje planeada durante la administración del ex presidente Jair Bolsonaro (PL) y también realizada durante el gobierno de Lula, según testimonio revelado por UOL. Al mismo tiempo, el ministro de Relaciones Exteriores, Mauro Vieira, se reunió con el canciller paraguayo, Rubén Ramírez, en Buenos Aires.
Según una publicación de Itamaraty, el viernes (11), “discutieron formas de avanzar en la resolución de cuestiones bilaterales, como las negociaciones sobre el Anexo C del Tratado de Itaipú, obras de infraestructura y cuestiones de seguridad”.
También estaban en la agenda “las investigaciones en curso en Brasil para esclarecer una operación de inteligencia previamente determinada en relación con Paraguay, cuyos resultados serán comunicados a las autoridades paraguayas tan pronto como se hagan públicos”.
En una declaración a la Policía Federal, a la que también tuvo acceso el informe, un funcionario del organismo afirmó que el ataque contó con la autorización del actual director general de la ABIN de Lula, Luiz Fernando Corrêa, lo que el Gobierno brasileño niega.
La acción de hackeo, realizada fuera de Brasil, habría resultado en la captura de datos de varias autoridades paraguayas. En el comunicado, el enviado menciona, entre los objetivos, a los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados, además del titular de la Casa Civil paraguaya.
En privado, funcionarios de ABIN dicen que existe el temor de que Paraguay desacredite a la agregada de inteligencia, lo que la obligaría a terminar la misión antes de tiempo y regresar a Brasil.
El cargo lo ocupa un ex jefe de gabinete del diputado federal y ex director general de ABIN, Alexandre Ramagem (PL-RJ); los nombres de quienes ocupan cargos en ABIN se mantienen en secreto.
Cuando dejó ABIN para presentarse a las elecciones de 2021, Ramagem nombró para el cargo a Víctor Carneiro, nombrado en el testimonio del servidor como director general de ABIN en el momento en que comenzó la operación. El caso salió a la luz el 31 de marzo, exigiendo una reacción de las autoridades brasileñas.
La PF ve con sospecha el papel del actual director general de la ABIN, Luiz Fernando Corrêa, en el caso. Él y el director general en funciones en el momento del presunto espionaje, Alessandro Moretti, fueron citados a prestar declaración hoy jueves. Los investigadores han presentado pruebas para afirmar, entre otros puntos, que Corrêa ya estaba dando órdenes dentro de ABIN.