El esquema está conformado por tres fintechs (empresas que utilizan la tecnología para ofrecer servicios financieros innovadores), que en cinco años habrían generado 6 mil millones de reales (G. 8.280.000.000.000) para diversas organizaciones criminales, publica el portal Infomoney.com.br.
Este “complejo sistema bancario paralelo e ilegal”, montado, según la Policía Federal, por las fintechs que son investigados, movió miles de millones de reales dentro del Brasil y desde o hacia países como Paraguay, Argentina, Bolivia, Colombia, Perú, Panamá, Estados Unidos, Canadá, Países Bajos, Inglaterra, Italia, Turquía, Dubái y especialmente Hong Kong y China, detalla Infomoney.
Las 16 órdenes de detención preventiva y 41 órdenes de registro e incautación emitidas por el Tribunal Federal fueron ejecutadas por alrededor de 200 agentes en las ciudades de Campinas Cajamar, Guarulhos, Itaquaquecetuba, São Paulo, Brasilia, Vila Velha, Foz do Iguaçu, Fortaleza, Florianópolis, São José y Feira de Santana, cubriendo seis estados.
Según la Policía Federal, reseña Infomoney, el esquema involucra la participación de decenas de personas, entre extranjeros y brasileños, “en las más variadas funciones y actividades, como policías militares y civiles, directores de bancos y contables”.
Algunas estrategias utilizadas por la banda para lavar dinero, identificadas por la PF, son: facturación, uso de empresas pantalla, terceros como agentes y testaferros, falsificación de documentos de importación y exportación, dispersión de operaciones bancarias, operaciones cambiarias fraudulentas, cobro de efectivo en comercio minorista. establecimientos comerciales y dólares de cable con fintechs, cuentas de bolsillo y transferencia de recursos a criptoactivos, especialmente monedas estables.