En el segundo día del novenario de la Virgen de Caacupé, el obispo de la Diócesis de Misiones y Ñeembucú, Pedro Collar, pidió durante su homilía que los cristianos renueven su compromiso evangelizador, incluso en el mundo de la política.
Instó a las personas poner en práctica la palabra de Dios, “promoviendo el diálogo social (…) prestando atención al clamor de la madre tierra ante la utilización indiscriminada de agrotóxicos, la tala despiadada de los bosques y favoreciendo acciones concretas a favor de la causa común, porque todo está conectado”.
Por otro lado, el religioso apeló a que se promueva “la dignidad de la persona, la dimensión religiosa del hombre, la familia, la libertad de conciencia, la solidaridad, la justicia, la promoción de la mujer, fomentar la organización y la dignidad en el trabajo, luchar por unas relaciones económicas que posibiliten mayor equidad e inclusión social”, expresó.
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Defensa de la vida
El obispo también se dirigió a los laicos para que en esa misión evangelizadora se defienda “la vida desde la concepción y hasta su muerte natural, procurando la honestidad y verdad para que el bien común y la justicia sean un bien para todos”.
Collar abogó para que los cristianos mezclen y encarnen en “la realidad sufriente del mundo, pobres, presos, mujeres objetos de violencia, niños y niñas explotados, desahuciados, excluidos de servicios sociales, inmigrantes, ancianos, desocupados, hombres que han perdido el sentido de la vida”.
“Hoy, la patria que tenemos, con sus luces y sombras, cuenta con ustedes. Involúcrense en el quehacer de un mundo más humano y cristiano. Como dijo Diogneto en el Siglo II “Lo que es el alma para el cuerpo, eso son los cristianos para el mundo”, expresó.
El tema principal de la segunda celebración del novenario a Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé fue “La palabra de Dios en la Misión de la Iglesia”. El pasado domingo se inició el novenario a la Virgen de Caacupé quien es considerada como la patrona de la fe del Paraguay.