Lentamente los peregrinos van copando cada vez más la Ruta PY02 para llegar a Caacupé.
Foto: Daniel Duarte.
La lluvia y el leve descenso de temperatura no es impedimento para que los promeseros visiten a la Virgen de Caacupé.
Los peregrinos tuvieron que ponerse pilotín para no mojarse tanto bajo la lluvia.
La Basílica de Caacupé recibe a los peregrinos en masa cada 8 de diciembre.
La Policía Nacional destinó 8.000 efectivos para la seguridad en esta fiesta mariana.
Varios se resguardaron de la lluvia bajo el toldo frente a la Basílica.
A pesar de la lluvia y la falta de sol, se deben hidratar para la larga caminata.
La lluvia agarró a muchos turistas en el centro de Caacupé.
El 8 de diciembre se celebra a la Virgen de Caacupé.