Las calles y avenidas de la capital, así como varias de las ciudades que conforman el área metropolitana y el Departamento Central, se encuentran en un alarmante estado de abandono. Los baches y los enormes cráteres son una constante, los cuales, a pesar de las quejas y los reclamos por parte de la ciudadanía a las autoridades, nunca son resueltos. Las autoridades municipales no aciertan en reaccionar ante el lamentable estado de la deteriorada infraestructura vial, lo que demuestra de esta manera no solo desinterés, sino, además, incompetencia.
No solamente las soluciones no se concretan, sino que, además, las promesas tampoco se hacen realidad. Cabe recordar que el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), a mediados del mes de agosto, había anunciado obras de mejoramiento de esta avenida, sin que hasta la fecha se hayan iniciado los trabajos prometidos. La ministra había informado acerca de la licitación ya adjudicada e informado que “los trabajos arrancarán muy pronto”. Las autoridades reconocían la importancia de esta vía junto con otras muy utilizadas por la población, como Eusebio Ayala, España, Artigas, San Martín, General Santos y Félix Bogado; por eso impulsaron el proyecto de rehabilitar y mantener la avenida Mariscal López, desde Madame Lynch hasta el cruce Yberá, en San Lorenzo, lo que supone un total de 6,3 km.
Los trabajos que deberían desarrollar consistían en movimiento de suelo, pavimentación, riegos asfálticos, obras de arte y drenajes, construcción de alcantarillas celulares, señalización horizontal, entre otros, como el acondicionamiento de vías alternativas que funcionarán como desvíos durante las obras.
Sin embargo, pese a los reclamos, la necesidad de soluciones y de que la obra ya fue adjudicada y se dispone de los recursos, las tareas aún están en estado pendiente.
En cuanto a la gestión de la Intendencia de Asunción, concretamente, dada que la reparación de la avenida Mariscal López es competencia del Gobierno, se debe mencionar una publicación reciente de este diario, que informaba respecto de los más de G. 60.000 millones en obras que esperan ser adjudicadas, las cuales se encuentran dentro de un proceso que se inició ya en el mes de setiembre de 2023 con obras que beneficiarían a más de 20 barrios. Mencionaba también esta publicación que en el balance de la Comuna asuncena apenas se ve una ejecución del 13% en obras de gran envergadura, y un insignificante 3% para desarrollo urbano.
Entre estas mejoras que los vecinos vienen esperando desde hace mucho tiempo se puede mencionar el mejoramiento de puentes peatonales y empedrados de unos 20 barrios, así como también varios proyectos de desagüe pluvial. La administración del Óscar Nenecho Rodríguez había promocionado el desagüe pluvial para 10 cuencas, e incluso se habían emitido bonos para encarar dichas obras de gran envergadura; sin embargo, Asunción ha caído en una grave crisis financiera por este endeudamiento y las obras hasta el momento brillan por su ausencia.
Las quejas y los reclamos no encuentran eco, así tampoco autoridad alguna se hace responsable de los perjuicios que sufren a diario los conductores debido al mal estado de calles y avenidas.
Ha llegado la hora de que cambie la dinámica en la cual los candidatos durante las campañas políticas hacen grandes promesas en sus discursos grandilocuentes, pero luego olvidan las necesidades de la población. Al mismo tiempo, en esa nueva dinámica sería necesaria una ciudadanía activa que participe, que sepa reclamar sus derechos y sea más protagonista de la vida en su ciudad.
