Un proyecto de ley que está en estudio en la Cámara de Senadores, que esperan se trate la próxima semana, plantea la condonación de las deudas de los campesinos de hasta G. 150.000.000, de préstamos que fueron sacados principalmente de bancos privados.
Así señaló ayer Filemón Paredes, presidente de la Organización Nacional de Cañicultores.
Fue durante el quinto día de las manifestaciones multisectoriales que se están desarrollando en la capital del país, y que nuevamente generaron un caos en el tránsito durante toda la mañana y hasta después del mediodía.
Además aumentó la cantidad de labriegos, que ayer llegaron a 25.000 manifestantes, y otros 7.000 se sumarán a la medida hoy, por lo que incluso ocuparán la Plaza Uruguaya.
Los cooperativistas, campesinos y pocos frentistas del Metrobús se instalaron en la Plaza de Armas, frente al Congreso Nacional, donde apenas caben. Ayer eligieron marchar sobre la avenida Mariscal López, además de las calles México y Chile, lo que ocasionó gran embotellamiento en las calles aledañas.
CULPAN AL GOBIERNO. El dirigente cañicultor dijo que se endeudaron con la promesa (del Gobierno) de que tendrían mercado y precio justo para sus productos. Sin embargo, el contrabando generó que no tuvieran dónde vender, y la situación “les obligó" a que prácticamente “regalen” sus productos.
“Varios ingenios traen, por ejemplo, azúcar y lo vuelven a empaquetar para la reventa como productos fabricados por ellos. Esta situación afectó a los cañicultores. Además prometieron que Petropar compraría caña dulce a G. 170.000 por tonelada, y nos pagaron solo G. 140.000", aseveró.
Enfatizó que los afectados son los pequeños productores de la agricultura familiar campesina, que tienen plantaciones de hasta 30 hectáreas y son: cañicultores, productores de tomate, mandioca, maíz, poroto, banana, piña, entre otros. “Nosotros no tuvimos mercado para vender nuestra producción. La agricultura familiar campesina está pasando por un momento muy difícil”, lamentó.
Continuó: “Hay personas que deben G. 500.000, G. 1.000.000 y algunos hasta G. 150.000.000, y para esas personas queremos la condonación de deudas porque en el caso de los cañicultores, por ejemplo, sacamos préstamos de G. 5.000.000 por cada hectárea, que representa solamente el 2% de todo el grupo”.
Paredes expresó además que molestan a la ciudadanía porque no tienen opción. “No podemos pagar, esa es la realidad, por eso llegamos a estos extremos y hay riesgo de que compatriotas pierdan sus casas o sus bueyes”, señaló.