La ambición desmedida, el uso de cualquier tipo de recursos para lograr objetivos y la falta de vergüenza y consideración hacia la gente siguen siendo características principales de algunos candidatos.
El diputado Hugo Ramírez, quien aspira a la intendencia capitalina, el actual ministro de la Juventud, Felipe Salomón, aspirante a la intendencia de San Lorenzo y la abogada Laura Paredes, candidata a concejal de Capiatá, constituyen el ejemplo de ello: Intentan obtener ventajas usando la pandemia para promocionarse políticamente.
Para el efecto, distribuyen elementos que sirven para la higiene y utilizan a esta enfermedad que tiene en jaque al mundo entero, para hacer propaganda política.
El hijo del senador Óscar Salomón imprimió un eslogan en frascos de alcohol en gel que hoy escasea en el mercado nacional. “Felipito Salomón 2020. ¡Por vos, por los tuyos, cuidate!”, reza el escrito. En tanto, Ramírez aprovechó la crisis originada en varias ciudades por la falta de agua y la falta de respuesta de la Essap, para repartir botellones del vital líquido por los barrios y ufanarse de ello en sus redes sociales. La diputada liberal Celeste Amarilla tildó de miserables a los citados candidatos.