El presidente de la Cámara Paraguaya de la Construcción (Capaco), José Luis Heisecke, admitió ayer que las constructoras tendrán dificultades para cumplir con la inversión de USD 900 millones que proyecta el Gobierno –en Obras Públicas–, si el sistema financiero no les facilita el acceso a créditos a largo plazo.
Fue en el marco de una reunión que mantuvieron los directivos del gremio con representantes de entidades financieras públicas y privadas. Por esta situación, los empresarios solicitaron a las entidades que les faciliten empréstitos con garantías de los contratos a ejecutarse y certificados de los proyectos en ejecución.
“Va a ser difícil (ejecutar las obras por USD 900 millones). No digo que no se pueda cumplir, pero para empezar una obra probablemente se tenga que comprar equipos por el valor total de la obra. Esos equipos no se podrán pagar en dos años, sino en cinco o siete años. Si no se puede comprar esos equipos, se va a tener que hacer con los equipos viejos que se tengan y ahí sí cuesta poder llegar a los ritmos de ejecución que el Gobierno hoy requiere”, expresó.
Resaltó que aunque están en la misma línea del Gobierno, “estamos adelantándonos un poco a la problemática”, pues “si no tenemos acceso al crédito es difícil que se llegue a la meta, sinceramente”, acotó.
Heisecke indicó que, por ejemplo, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) agregó varias exigencias en las nuevas licitaciones, que en algunos casos “endureció” y en otros casos “flexibilizó”.
“En líneas generales lo que quiere Obras Públicas son equipamientos nuevos, para que se hagan en tiempo y en forma. Entonces hay requerimientos nuevos. Piden máquinas que no superen los 5 o 10 años de antigüedad, para que de esa forma las empresas constructoras vayan equipándose y vayan poniéndose acorde a las circunstancias”, enfatizó.
En este sentido, dijo que para tener una idea, la licitación de reconstrucción de la Transchaco exige que el 50% del equipamiento sea propio. “La Transchaco va a necesitar en cada tramo entre 180 a 200 máquinas, los cuales 90 a 100 máquinas tienen que ser propias. Si se multiplica por 300.000 a 400.000 dólares que cuesta cada máquina, se tiene una idea de lo que cuesta trabajar en una obra vial”, argumentó.
Reiteró además que los créditos se vieron afectados por la caída del sector de la construcción.
Equipo de trabajo
Raúl Vera Bogado, presidente de la Asociación de Bancos del Paraguay (Asobán), que representó a las entidades privadas, resaltó que el repunte económico dependerá de las obras a ejecutarse en el segundo semestre, por lo que buscarán un trabajo interinstitucional entre el MOPC, BCP y Hacienda para facilitar el acceso a los créditos. Señaló que aumentarán los esfuerzos para dinamizar la ejecución del Gobierno.