La Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) presentó ayer su balance del 2022 y sus perspectivas para el próximo año, atendiendo a que los cultivos que definirán la próxima cosecha están en pleno desarrollo.
Aunque las semillas se sembraron a tiempo y con buena humedad en los suelos, el clima frío que se extendió hasta noviembre y las altas temperaturas de diciembre dificultaron el aprovechamiento del agua. “Tenemos un cálculo aproximado de pérdida ya para la próxima cosecha, no va ser enorme, pero ya muy importante que irá en el orden de las 1 millón de toneladas, de las 10,2 a 10,3 millones que teníamos previsto cosechar”, explicó el asesor agrícola del gremio Luis Cubilla.
En algunas zonas donde se esperaban rendimientos de entre 3.800 y 4.000 kilos por hectárea, los productores ahora proyectan entre 3.000 y 3.200 kilos.
Las perspectivas se irán corrigiendo a medida que avance la campaña. Aún con estas mermas, el sector califica como una zafra razonable y “un año promisorio”, teniendo en cuenta que la demanda de soja sigue alta y que persiste un precio internacional que no baja de los USD 500 por tonelada.
De esta manera, Capeco ratificó que será una campaña de recuperación para los agricultores y de mayor ingreso de divisas para el país, siendo que este año dejaron de ingresar por este rubro USD 3.000 millones por la pérdida del 70% de la producción, recordó a su vez el titular de la Cámara César Jure.
El empresario también expresó su preocupación respecto a las restricciones que plantea imponer la Unión Europea por temas ambientales y sociales. Al respecto, teme un impacto en los subproductos con una mayor burocracia, más costos y pérdida de competitividad.
Pedido a políticos
César Jure también se refirió al contexto electoral del país y lanzó un mensaje a los candidatos. “Deseamos y pedimos al sector político que podamos mantener la gobernabilidad y asegurar estabilidad en la transición con las nuevas autoridades que serán electas en abril del 2023 que podamos seguir trabajando juntos sin perder el control de toda la gestión fiscal, que es una de las piedra angulares que tiene el Paraguay…”, agregó.