La carga de 976 kilos de cocaína incautada el pasado viernes en el aeropuerto Silvio Pettirossi logró superar tres controles de diferentes instituciones antes de ser confiscada, según confirmó a radio Monumental 1080 Óscar Orué, titular de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT)
Orué evitó mencionar a las instituciones que realizaron los controles previos para no advertir a las organizaciones dedicadas a este tipo de ilícitos.
Si bien manifestó que la investigación ya está en manos del Ministerio Público, el funcionario mencionó que se tiene la sospecha de que el cargamento fue contaminado antes de llegar al aeropuerto.
“Los paquetes cuando llegan al aeropuerto son monitoreados por cámaras. No se puede contaminar en el aeropuerto. En estos controles estaba bien mimetizada la droga”, expresó.
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El cambio de estrategia para el control de las cargas que salen de nuestro país fue lo que permitió esta incautación, considerada histórica por las autoridades, que estiman que generaron una pérdida de USD 48 millones a las organizaciones criminales.
“Ni bien asumimos el cargo en agosto, cambiamos la estrategia de lucha contra la posible contaminación de cargas y comenzamos a trabajar de otra forma”, destacó Orué.
El operativo para esta incautación comenzó hace ocho meses, con un trabajo de inteligencia que estuvo a cargo de la DNIT junto a efectivos de la Unidad Especial de Inteligencia Sensible Antinarcóticos y Hechos Punibles Conexos de la Policía.
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La carga ilícita tenía como destino Ámsterdam, Países Bajos, con paso previo por Madrid, España, según los datos que manejan los investigadores.
En los paquetes donde ocultaron la droga se podía leer la inscripción de la reconocida marca Selecta, perteneciente a la empresa Eno Brönstrup SA (EBSA).
La compañía manifestó su preocupación y consternación ante la vinculación con el narcotráfico y deslindó toda la responsabilidad sobre el hecho, afirmando que fueron víctimas de manipulación fraudulenta por parte de terceros.