Un menor, que montaba uno de los equinos en competencia, cayó en plena carrera junto a su caballo y de milagro no fue aplastado por el voluminoso animal.
A pesar de la gravedad, el hecho no está en el reporte de la Policía Nacional, cuyo agente incluso aparece en el video grabado por un aficionado a este deporte.
Este grave hecho desnuda una vez más que esta práctica de utilizar a menores como jockey en las carreras de caballos (en su mayoría clandestinos), a pesar de estar taxativamente prohibido, sigue vigente y campante en la más absoluta complicidad de las autoridades.
El grave hecho se registró en la jornada del domingo en un hipódromo de la localidad de San Miguel de Guazú Ygua, San Pedro Del Paraná, donde una multitud se hizo presente para observar la tradicional carrera.
En un momento dado, en plena carrera, y por razones aún desconocidas, uno de los caballos que iba montado por el menor cayó estrepitosamente junto al jockey que milagrosamente no fue aplastado por el equino.
A juzgar por las imágenes, la caída fue violenta y tanto el menor como el animal sufrieron lesiones de consideración, y ambos quedaron tendidos en la cancha de carrera.
Inmediatamente, uno de los presentes auxilió al afectado, pero no existen reportes si fue derivado al centro asistencial de San Pedro del Paraná o de alguna localidad vecina. Tampoco a 24 horas del hecho, la policía informó al respecto.
Está prohibido que menores estén siendo utilizados en este tipo de actividades, en este caso un “deporte” de altísimo riesgo.