Es así que se dio la ratificación de Jaime Bestard como presidente del Tribunal Superior de Justicia Electoral, y también se le asignó a la ex titular del Parque Tecnológico Itaipú, de la era Cartes, María Teresa Peralta, el cargo de directora del Registro Electoral.
A poco tiempo de que se realicen nuevas elecciones, tanto internas partidarias como municipales, se van asentando piezas del cartismo dentro de la máxima institución electoral. Si bien Bestard fue recientemente ratificado como presidente, cargo que ejerce invariablemente desde hace cinco años, hace un par de meses también se dio un cambio clave en una de las dependencias, el Registro Electoral.
Dicha dirección, a cargo de María Teresa Peralta, se dio en un momento de tensión política entre el oficialismo colorado y el cartismo, y llamó la atención que fuera una disposición partidaria inconsulta a nivel de su Comisión Ejecutiva, que es donde se deciden estos temas, por lo general de consenso. Además el cambio se dio intempestivamente, sin que el anterior representante, Lidio Franco, quien gozaba de la confianza del abdismo, haya tenido cuestionamientos.
La llegada de Peralta además coincide con la manifestación de supuestos hechos irregulares de traslado, los cuales se estarían gestando en registros a nivel país.
Las fuentes indican que, con el presidente del TSJE más la cuarta ministra –como se denomina a quien ejerce el cargo de director o directora en el Registro Electoral– en los bolsillos del cartismo, se viene una nueva interna de poder dentro del partido de gobierno. De hecho, cuando se dio el repentino cambio en el Registro Electoral, el entonces senador Rodolfo Friedmann se quejó y calificó el cambio como uno meramente movimentista. Incluso instó a que se inicie un juicio político contra Bestard.
“Que no nos venga a llorar después aquí el presidente del Tribunal (Jaime Bestard), esto amerita un juicio político, esto atenta totalmente contra el control mutuo”, mencionó y había calificado el manejo del TSJE como de “boliche, criminal, mafioso”. Dijo esto en el pleno del Senado durante el cambio que se dio en julio pasado. Sostuvo que Peralta es una “cartista a ultranza” y solo respondería a los intereses de ese movimiento, no del partido.
Jaime Bestard fue apoderado general del movimiento Honor Colorado, durante la campaña para las elecciones presidenciales, donde Cartes se impuso ante Efraín Alegre.
También, Peralta fue una de las apoderadas del movimiento en las últimas elecciones, donde Santiago Peña no logró imponerse contra Mario Abdo Benítez, quien lideraba la disidencia en ese entonces. Los puestos claves dentro de la Justicia Electoral tienen a su cargo el control, el juzgamiento, la organización y la administración de las elecciones y, en tiempos en que no hay elección, tienen prácticamente destinado todo su presupuesto a los gastos rígidos o de funcionarios.