Los agentes fiscales Osmar Legal y Alma Zayas ordenaron recientemente la detención del abogado José Ávalos, quien presuntamente contactó y solicitó al funcionario judicial detenido, Néstor Zárate, un cheque —que está en custodia como prueba— de la causa del ex dirigente deportivo Ramón González Daher.
Además, de acuerdo con lo señalado por la Fiscalía a través de sus redes sociales, el profesional del Derecho habría ofrecido a Zárate unos G. 5 millones a cambio del documento que se encontraba entre los depositados en el Juzgado de Garantías 9, del magistrado Rolando Duarte.
Néstor Zárate ya fue detenido e imputado este último viernes por el supuesto hecho de soborno, tras una entrega vigilada encabezada por los representantes del Ministerio Público. El procedimiento se logró mediante la denuncia realizada por Duarte y sus funcionarios.
De acuerdo con lo que señaló la fiscala Zayas a radio Monumental 1080 AM, el funcionario entregó unos G. 200.000 a su compañero para obtener el cheque y el monto era parte de unos G. 500.000 que le había ofrecido Ávalos, a cambio de que le ubique el documento.
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Asimismo, señaló que se solicitó al juez de turno la autorización para efectuar la grabación en el marco de la investigación. Según los datos, el cheque forma parte de una serie de cheques que pertenecen a la causa de Ramón González Daher, que fueron sustraídos con anterioridad y que luego fueron recuperados.
Rechazan sobreseimiento
Tras la audiencia preliminar de este último jueves, el juez Rolando Duarte rechazó el pedido de sobreseimiento provisional de la Fiscalía para el prestamista, en la causa que enfrenta por quebrantamiento del depósito y extorsión, debido a la desaparición de cheques.
Asimismo, también se rechazó el sobreseimiento definitivo solicitado por la defensa del usurero, por lo cual la Fiscalía General del Estado ahora debe ratificarse en su pedido de sobreseimiento provisional o presentar acusación contra González Daher. Esto debe hacerlo en los próximos días.
La argumentación del magistrado para el rechazo fue la inexistencia del hecho o por duda, en el caso del robo de unos 380 cheques del Juzgado de Delitos Económicos, que eran pruebas contra el prestamista.
El ex dirigente deportivo ya se encuentra recluido tras las rejas, tras haber sido condenado a 15 años de cárcel en otra causa por usura, lavado de dinero y denuncia falsa.
En este caso también fue sentenciado su hijo Fernando González, pero en su caso fue a 5 años de prisión, en carácter de coautor.