Con una serenata y las mejores selecciones de música paraguaya y religiosa, la feligresía católica cerró el novenario de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, que hoy celebra su día, en el Santuario Nacional, ubicado en Tacuary, entre Blas Garay y Lomas Valentinas, de Asunción.
Desde la parroquia Santa María Goretti, del populoso barrio Ricardo Brugada, en caravana con moto, auto, bicicleta, los fieles realizaron una peregrinación hasta el santuario donde participaron de la fiesta de fe en comunidad, sumándose así al último rezo de la novena y posterior serenata.
Los festejos en honor a la Madre del Perpetuo Socorro empezaron a marcar más fuerte la devoción de los fieles desde el domingo con la procesión de la santa imagen por las calles de la capital.
Centenares de personas, estudiantes, docentes y padres de familia participaron de la jornada. El padre Enrique López señaló que la procesión de la imagen del Perpetuo Socorro, que tradicionalmente se hace en su día, se adelantó aun en tiempo de la novena.
El sacerdote invitó a todos los fieles marianos a participar de las celebraciones eucarísticas que se ofrecerán en el día en el santuario en Asunción. ‘‘Tendremos misa a las 6:00, 7:00, 8:00, 10:00; 17:00 y a las 19:00 que será la misa central’’.
Nuestra Señora del Perpetuo Socorro es la patrona de los padres redentoristas y su ícono original está en el altar mayor de la iglesia de San Alfonso, en Roma. La imagen a la que miles de paraguayos veneran en sus casas, templos y oratorios hace referencia al cuidado de la Virgen por Jesús, desde su concepción hasta su muerte, y que hoy sigue protegiendo a sus hijos que acuden a ella, según destacan los redentoristas.
HISTORIA. Según relatan, el cuadro de la Virgen del Perpetuo Socorro tuvo su origen en la isla de Creta, en el mar Egeo. Un mercader robó el ícono de una iglesia, lo escondió entre su equipaje y se embarcó rumbo a otras tierras. En la travesía se desató una violenta tormenta y todos a bordo esperaban lo peor. El comerciante tomó el cuadro, lo sostuvo en lo alto, y pidió socorro. ‘‘La Santísima Virgen respondió a su oración con un milagro. El mar se calmó y la embarcación llegó a salvo al puerto de Roma’’, publica catholic.net
La devoción a la Virgen del Perpetuo Socorro en Paraguay vino de la mano de los redentoristas, cuya presencia en el país se remonta a abril de 1930, cuando el padre Francisco Mohr cruza la frontera de Bella Vista, Brasil, para visitar la iglesia de Bella Vista Norte en Paraguay, donde celebró una misa el 29 de abril, al día siguiente de su llegada.
Hoy, su santuario espera como cada a año a cientos de fieles y promeseros de la comunidad religiosa para saludar a la ‘‘Madre que siempre cuida de su Hijo’’.