Unos 180 alumnos, desde el preescolar hasta el sexto grado de la Escuela Número 7141 Virgen del Carmen, del kilómetro 12 Acaray, de Ciudad del Este, dan clase bajo carpa, mientras se espera la conclusión de la reparación de seis aulas ejecutadas por la Municipalidad a través del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide).
La dirección de la institución había solicitado al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), a través de la supervisión, la provisión de aulas de emergencia, mientras duren las refacciones. Hasta el momento se espera una respuesta, mientras, los padres montaron una estructura de madera cubierta con carpa negra, para dar clases.
No es lo ideal, pero es lo que hay y bajo esas condiciones están cumpliendo con su labor los docentes de esta institución. Mencionan que cuando hay lluvia, por ejemplo, tienen que suspender directamente las actividades, porque es imposible desarrollar cualquier actividad.
Jorgelina Almada, presidenta de la Asociación de Cooperación Escolar (ACE), relató que son muchas las necesidades que tiene la institución, valoró la inversión que se está realizando para la reparación de las aulas, pero dijo que los alumnos tampoco pueden dar clases bajo carpa por mucho tiempo, por lo que considera necesario buscar una forma para coordinar mejor los trabajos, aprovechando el tiempo de vacaciones.
ORGANIZACIÓN. “Ya ven cómo esta nuestra escuela y nuestros docentes están enseñando bajo carpa y es complicado, esto es así porque nuestra escuela está siendo reparada. Esperamos que las obras concluyan los más rápido posible, porque no podemos tener a nuestros niños por mucho tiempo en estas condiciones”, relató.
Pidió que se acelere la obra y se concluya por lo menos una o dos aulas para poder organizar mejor mientras esperan la conclusión total de los trabajos. “Lo ideal es que este tipo de reparaciones, que son muy necesarias, se realicen durante las vacaciones, desconozco el motivo del porqué no se hizo así, pues eso nos evitaría esta situación que estamos viviendo ahora”.
Sospecha que los problemas internos dentro de la Municipalidad, que estuvo intervenida desde el 5 de diciembre hasta el 2 de febrero, habrían influido en el tardío inicio de las obras. “Creemos que el problema que tuvo la administración municipal nos terminó afectando. Porque en noviembre ya vinieron a decirnos que nuestra escuela iba a ser reparada. Es linda la obra, pero mientras no termine estamos bajo carpa”.