Al contestar la recusación planteada en su contra en el caso Centenario, la fiscala Teresa Sosa sostuvo que no hay motivos para que ella sea apartada de la investigación. No obstante, aclaró que la última decisión la tiene el fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón. La contestación de la recusación fue presentada ayer ante este último, según indicaron fuentes del Ministerio Público.
Días atrás, los abogados de la querella adhesiva, José Ignacio González Macchi y Cecilia Pérez Rivas, recusaron a la fiscala alegando que la misma fue hasta el canal SNT Cerro Corá y la radio Ñanduti para pedir que el tratamiento informativo del caso sea a favor de los cuatro imputados.
En el escrito presentado ayer ante la Fiscalía General, Sosa señala que la recusación planteada en su contra no prueba ninguna de las causales de separación de fiscales que están previstas en la ley.
Ahora, el fiscal general Díaz Verón deberá decidir si separa o no a Sosa de la causa. Mientras tanto, la investigación es llevada adelante por los fiscales Édgar Sánchez y Lorena Ledesma.
Estos dos están realizando los últimos actos investigativos en la causa, ya que el próximo 19 de noviembre vence el plazo que tiene el Ministerio Público para indagar al primer imputado y principal sospechoso en la investigación.
Los fiscales deberán presentar una acusación en contra del adolescente o bien solicitar su sobreseimiento.
Actualmente, son tres adolescentes y una joven los procesados por la supuesta violación a otra adolescente dentro del Club Centenario en la noche del 10 de noviembre de 2012.
La Fiscalía cuenta con un informe forense y la declaración de la presunta víctima en una Cámara Gesell, en la que relató cómo se dieron los hechos. Sin embargo, días atrás, una junta médica inspeccionó 22 fotografías tomadas por forenses a la adolescente y en mayoría dictaminó que no había señales de violencia. Esta pericia es desacreditada por la querella.