“No tengo palabras para explicar lo que estoy sintiendo. Es una mezcla de sensaciones. Una gran alegría por poder estar aquí de nuevo, sentado aquí. Pero al mismo tiempo estoy de luto porque he perdido...he perdido muchos amigos”, dijo Ruschel, quien rompió en llanto antes de terminar la frase, invadido al recordar a sus compañeros fallecidos en el accidente aéreo, informó portal digital de Globo Esporte RS.
“En el momento que cayó el avión, Dios decidió que yo tenía más misiones aquí en la Tierra, por eso no me llevó. El primer milagro es que yo esté vivo y el segundo es que pueda estar andando”, añadió en la rueda de prensa ofrecida en el estadio del Chapecoense.
“Voy a hacer todo para volver a jugar. Con mucha paciencia, voy a hacer todo para poder darles mucha alegría a los médicos, a la gente que siempre está presente, a todo el mundo que hincha por el Chapecoense. Voy a hacer todo para darles mucha alegría a esas personas”, relató de manera desgarradora.