“Desde que tomó posesión de su cargo (el lunes), el dirigente de la región de Taiwán ha cuestionado seriamente el principio de una sola China (...), lo que está empujando a nuestros compatriotas de Taiwán a una peligrosa situación de guerra”, declaró Wu Qian, portavoz del Ministerio de Defensa, en un comunicado.
“Esto se llama jugar con fuego, y los que juegan con fuego seguro que se quemarán”, añadió.
“Cada vez que (el movimiento que apoya) ‘la independencia de Taiwán’ nos provoque, iremos un paso más allá con nuestras contramedidas, hasta lograr la reunificación completa de la patria”, advirtió el portavoz.
El ejército chino inició el jueves dos días de ejercicios militares alrededor de Taiwán, que el lunes celebró la investidura como presidente de Lai Ching-te, considerado por Pekín como un “peligroso separatista”.
El Ministerio de Defensa de Taiwán dijo que se detectaron 62 aviones (...) 47 de los cuales cruzaron la línea mediana, en referencia a la línea que divide la estrecho de Taiwán, situado entre la isla y China continental.
Se trata del mayor número de aviones observados en 24 horas este año. El ministerio también censó 27 buques de la armada y guardacostas chinos, movilizados para estos ejercicios.
El dispositivo forma parte de una campaña de escalada de la presión militar de China sobre esta isla de régimen democrático, con incursiones casi cotidianas de barcos y aviones en su entorno y varios ejercicios a gran escala desde 2022. Su objetivo es verificar “la capacidad para tomar el poder, atacar conjuntamente y controlar territorios claves”, señaló el portavoz chino Li Xi.
Los ejercicios se desarrollaron en el estrecho de Taiwán y al norte, sur y este del territorio, así como en las islas administradas por Taipéi de Kinmen, Matsu, Wuqiu y Dongyin. AFP