La policía nigeriana no esperaba un hallazgo tan macabro cuando intervino el restaurante de un hotel. Encontraron guardadas en bolsas de plástico cabezas de personas, además de armas y granadas.
Los uniformados recibieron denuncias de varios vecinos del hotel que alertaron sobre movimientos sospechosos en el lugar., informó el portal ABC de España.
“No estoy sorprendido ante esta impactante revelación...cada vez que iba al mercado, veía que pasaban cosas raras en el hotel”, declaró uno de los testigos.
En total fueron detenidas diez personas, entre ellos cocineros, propietarios y mozos del local gastronómico.
A uno de los clientes, un sacerdote, lo alertó el elevado precio de los platos, que era cuatro veces superior al salario mínimo de un trabajador nigeriano. Lo que el religioso no sabía es que el menú era exclusivo, por tratarse de carne humana.