El diverso y abultado grupo de convocantes –sindicatos, estudiantes, indígenas, artistas, ambientalistas y partidos opositores– lideran un paro nacional contra los lineamientos políticos económicos, sociales y de seguridad del mandatario, justo cuando su popularidad está en rojo.
“Es un acumulado de situaciones que esperamos que, así sea en una gran mesa nacional de concertación, empecemos a revisar”, explicó Julio Roberto Gómez, titular de la Confederación General del Trabajo, una de las organizadoras.
Mientras las organizaciones que promovieron el paro calculaban que hubo más de un millón de personas en las protestas, la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, estimó en cerca de 207 mil.
DISTURBIOS. Pese a que la marcha fue pacífica, según Gutiérrez, se reportó enfrentamientos entre encapuchados y autoridades en Bogotá, Manizales, Santa Marta y Cali, que dejaron 28 policías y siete civiles heridos, así como ocho capturados en otras ciudades.
Por “saqueos” y “hechos violentos”, en los que resultaron lesionados 23 uniformados y dos manifestantes del total nacional, la alcaldía de Cali decretó un toque de queda desde anoche hasta hoy.
En tanto, una batalla campal entre vándalos encapuchados y la Policía colombiana se desató ayer en la Plaza de Bolívar de Bogotá al cierre de las protestas contra la política económica y social.
Los encapuchados intentaron entrar a la fuerza en el Capitolio Nacional, situado en el costado sur de la plaza, y en el Palacio de Liévano, sede de la Alcaldía, en el lado oeste, lo que motivó la reacción de la policía. Los desórdenes iniciaron cuando la mayoría de los participantes en las manifestaciones –que fueron de modo pacífico en su mayor parte– se retiraban del centro de la ciudad.
Los vándalos arrojaron piedras y cócteles molotov contra los policías y también arrancaron las vallas instaladas por las autoridades para proteger la fachada de edificios históricos del centro de la ciudad.
Asimismo, se reportaron bloqueos en los sistemas de transporte y vías arteriales de algunas urbes.