10 abr. 2025

Comandante apunta a fortalecer Asuntos Internos: “No queremos ser una amenaza armada”

El nuevo comandante de la Policía Nacional, Carlos Benítez, se refirió a los uniformados corruptos dentro la institución de seguridad y al avance del crimen organizado en sus filas. Por ello, apuntó al fortalecimiento de Asuntos Internos para ser garantes de la seguridad y “no una amenaza armada para la sociedad”.

policias.JPG

El nuevo comandante de la Policía Nacional apuntó a fortalecer Asuntos Internos para sacar de sus filas a los policías corruptos. Foto: Andrés Catalán.

El comisario Carlos Benítez, nuevo comandante de la Policía Nacional designado por el presidente Santiago Peña, accedió a una entrevista con Chaco Boreal 1330 AM en la cual apuntó al fortalecimiento del Departamento de Asuntos Internos de la institución para eliminar a los uniformados corruptos o ligados con el crimen organizado.

“Nosotros no queremos convertirnos en una amenaza armada para la sociedad, al contrario, queremos ser garantes de la prevención y de la seguridad”, sostuvo al señalar que un solo uniformado corrupto representa una “amenaza grave” para la seguridad del ciudadano.

Benítez reconoció la existencia de policías vinculados con la delincuencia y el crimen organizado. “Esa es la mala noticia”, afirmó.

Nota relacionada: Peña anuncia a Carlos Benítez como comandante de la Policía Nacional

Cuando su nombramiento sea oficial a través de un decreto firmado por Peña, una de sus primeras tareas será, según dijo, la de sentarse con el personal de Asuntos Internos, de Justicia policial y con todos los directores de la institución para buscar una estrategia para “ir trabajando y eliminando de manera progresiva y sistemática la presencia de estos elementos”.

Asimismo, consideró —con base en su experiencia como instructor de oficiales— que los policías “bandidos” no son formados en la Academia de Policía, sino que se trata de una condición perversa de la persona.

Entonces, al tener el uniforme, armas a disposición y camaradas corruptos, es la “fusión perfecta para que estos empiecen a delinquir y perjudiquen a la ciudadanía y también nuestra imagen”, señaló.

El futuro comandante expresó que al conocerse la vinculación de policías con hechos punibles, el golpe es demasiado grande para “nosotros, la gran mayoría, que somos institucionalistas, que amamos nuestra institución policial, que respetamos la existencia de nuestra institución”.

Si bien reconoció que se hacen evaluaciones sicológicas de forma periódica o de acuerdo con la necesidad de cada caso, dio a entender que muchas de ellas no son exactas porque la conducta del ser humano varía según la circunstancia. Por lo tanto, apuntó a una constante reiteración de los estudios.

“Hay un equipo bastante bueno dentro de la Policía Nacional que hace ese tipo de evaluaciones. Hay que recordar también que la conducta del ser humano varía mucho de acuerdo con la circunstancia. Esas evaluaciones hay que ir reiterándolas”, indicó.

Exámenes de correspondencia a DDJJ

Para el futuro comandante, los exámenes de correspondencia con las declaraciones de bienes de los comisarios y otros uniformados es “totalmente aplicable” porque es fundamental “justificar sus bienes”, sostuvo.

Puede interesarle: Tentáculos del narcotráfico en el Estado, la política y empresas

“Para cada graduación y para cada cargo, existe la declaración jurada de bienes. Todo el personal policial está obligado a eso. De hecho, ahora, en el momento que pueda falsear eso, es pasible de una investigación y de una sanción”, aseguró al respecto.

Control de cédula en buses y barreras

Respecto al control de cédulas en las unidades del transporte público, Benítez afirmó que el último fin de los uniformados es “molestar a la ciudadanía”; al contrario, se busca dar garantía de que el usuario no esté viajando con “una persona que tenga cuentas con la Justicia”.

Señaló que los controles son ocasionales y que se realizan de acuerdo “al georreferenciamiento del comportamiento delincuencial”, un sistema que indica los puntos rojos de los barrios o ciudades que crecen a medida de las denuncias por hechos punibles reiterados, según explicó.

En ese sentido, indicó que en los operativos se les detuvo a varias personas con órdenes de captura y justificó que la presencia de los uniformados en los buses es porque muchas veces los delincuentes usan los buses como movilidad o cuando huyen de la policía.

Sobre las barreras policías, señaló que muchas de ellas fueron desapareciendo en todo el territorio nacional, debido a la informalidad y que solo se hacían con el “aval del Ministerio Público”.

“Muchas veces encontramos barreras en donde había dos o tres efectivos deteniendo vehículos y solicitando documentos de todo tipo. Hemos visto que había mucha informalidad en ese aspecto y tanto es así que la realización de barreras en el territorio nacional prácticamente desapareció”, finalizó.

Más contenido de esta sección
Nueve alumnos de una institución educativa están internados en diferentes centros ambulatorios luego de consumir vidrios en medio de una bebida caliente (cocido) de un termo qué aparentemente estaba roto. Ocurrió en Pedro Juan Caballero, Departamento de Amambay.
La Fiscalía solicitó una pena de 25 años de cárcel para Gustavo Florentín, principal acusado de la muerte del joven dirigente liberal Rodrigo Quintana.
Un camión que transportaba combustible sobre la ruta que une las ciudades de Paraguarí y Villarrica volcó luego de que una vaca suelta le haya salido al paso. El rodado luego se incendió y el chofer sufrió heridas leves.
Finalmente, luego de varios días y tras ser denunciado por lesión de confianza y apropiación, un policía devolvió los G. 53.500.000 que un suboficial le dio para que los guardara. Ocurrió en San Lorenzo, Departamento Central.
La sesión de la Cámara de Diputados de este jueves quedó sin cuórum a una hora de su inicio, dejando varios puntos del orden del día sin tratar, entre ellos el de incluir los gastos sociales de las entidades binacionales al Presupuesto General de la Nación. Además, los legisladores no sesionarán en Semana Santa.
Un niño de 2 años casi perdió el brazo al meterlo dentro de una centrifugadora. El hecho ocurrió en el barrio Remansito, de Ciudad del Este.