La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, afirmó en la Cumbre Mundial de Gobiernos que se celebra en Dubái que la guerra en Gaza entre Israel y el movimiento palestino Hamás, que estalló en octubre, ya ha perjudicado a las economías de Oriente Medio y del Norte de África.
“Lo que temo más es una prolongación del conflicto porque (...) aumenta el riesgo de que se extienda”, afirmó Georgieva.
“Ahora mismo vemos un riesgo de propagación en el canal de Suez”, dijo, en referencia al paso que conecta el Mediterráneo con el mar Rojo, unas aguas donde los rebeldes hutíes de Yemen lanzaron una andanada de ataques contra buques que consideran vinculados con Israel. Los rebeldes yemenitas, un movimiento afín a Irán, afirman que actúan en solidaridad con los palestinos de Gaza.
El conflicto en Gaza estalló tras un ataque de Hamás en el sur de Israel que dejó 1.160 muertos, en la su mayoría civiles. En respuesta, Israel prometió “aniquilar” a Hamás, que gobierna en Gaza desde 2007, y el Ministerio de Salud de este movimiento islamista afirma que 28.340 personas han muerto desde el inicio de la guerra.
El presidente del Banco Mundial, Ajay Banga, afirmó en el mismo evento que “lo que está ocurriendo en Gaza, pero también los desafíos de Ucrania (...) y el Mar Rojo” son los principales retos para las perspectivas de la economía mundial. AFP