Son 27 mujeres las que forman parte de la Comisión Mujer Paraguaya, quienes con el apoyo y acompañamiento también de hombres de la comunidad decidieron ponerse firmes y resistir.
Ante esta situación, se reunieron con el senador Miguel López Perito, quien primero los recibió en la sede del Congreso y días pasados visitó la localidad, donde comprobó personalmente las denuncias y los reclamos de estas personas.
Comentó que desde hace un tiempo estaban trabajando con este grupo de personas, cuyos derechos estaban siendo irrespetados , invadiendo y ocupando sus tierras y obligándolas a desalojar esos lotes.
“Hicimos las gestiones ante el Indert y seguimos trabajando para que ellos, ellas principalmente, tengan su certificado de ocupación, que los invasores salgan, ellas vuelvan a ocupar la tierra que legítimamente les corresponde y, por supuesto, gestionar posteriormente la titulación de estas tierras”, explicó el senador.
El legislador denunció que en el sitio hay una situación de abuso sobre mujeres indefensas por parte de gente que tiene dinero y manejo del poder, con el apoyo de políticos de la zona.
Resaltó que el SIRT (Sistema de Información de Recursos de la Tierra) ya realizó el trabajo de localización de lotes y se vio cuáles son los que legítimamente les corresponde a los pobladores del lugar y cuáles están en discusión.
“Iremos viendo cómo se resuelve, pero lo que nosotros estamos buscando es que inmediatamente ellas puedan disponer de su certificado de ocupación y volver a tener, sobre todo, la tranquilidad de estar en sus tierras, de producir, de atender a su familia como manda nuestra Constitución muy claramente en el Artículo 115, que expresa eso. Esperamos que el Indert cumpla con la tarea de resguardar los derechos de esta gente”, remarcó.
El senador anunció que tras las denuncias de amedrentamiento, disparos al aire y el ambiente inseguro que sienten los lugareños, hablará con el ministro del Interior y el comandante de la Policía; sin obviar las conexiones eléctricas clandestinas en beneficio de los colonos y la destrucción de casas, donde fueron reconstruidas otras por los extranjeros, que sin duda requieren urgente intervención de las autoridades competentes.