25 feb. 2025

Cómo ayudar a los chicos a retomar las rutinas académicas tras la vuelta a clases

31013441

En la primera semana de regreso a clases se pueden implementar las rutinas.


Ayer, todas las instituciones públicas del país dieron inicio al nuevo año escolar. Como cada ciclo, regresar a clases después de unas largas vacaciones representa un desafío, tanto para los estudiantes como para sus familias. Una de las principales preocupaciones de los padres es cómo ayudar a sus hijos a retomar la rutina académica tras un periodo de descanso, ocio y exposición a las pantallas.

Para responder a esta inquietud, la neuropsicopedagoga Rocío Miño comparte algunas recomendaciones claves para facilitar la transición y lograr que los niños se adapten a la nueva rutina sin que esto represente una carga excesiva a nivel físico y emocional.

RUTINAS PAULATINAS

La especialista recomienda incorporar las rutinas de manera gradual, especialmente en los horarios de sueño, ya que, de lo contrario, es muy probable que los niños estén más irritables, menos tolerantes y con menor capacidad de atención.

Durante la primera semana, algunos consejos prácticos para hacer la transición menos estresante y fomentar en los niños el sentido de la responsabilidad y la organización del tiempo incluyen: reducir progresivamente el tiempo de exposición a pantallas y el uso de la tecnología. “Al mismo tiempo, es importante conversar con ellos sobre el uso adecuado de estos recursos, buscando un equilibrio entre el entretenimiento y las herramientas que favorezcan su aprendizaje. De esta manera, podrán aprovechar al máximo su tiempo de recreación sin afectar su adaptación a la nueva rutina escolar”, mencionó la profesional.

ACTIVIDADES

“Sabemos que hoy en día existen un sinfín de aplicaciones en los aparatos electrónicos que fomentan las distintas áreas del aprendizaje, como ser matemáticas y lectura, así también, juegos que desarrollan la concentración, la memoria y el razonamiento. Pueden elaborar y decorar junto a sus hijos un calendario de actividades que los motive a iniciar el nuevo año escolar”, recomendó.

Una de las actividades que pueden marcar el inicio del regreso a clases es la compra de útiles escolares. Involucrar a los niños en la elección de sus materiales no solo los hace participar activamente en el proceso, sino que también alimenta la ilusión de volver a la escuela. Además, es un buen momento para hablarles sobre el reencuentro con sus compañeros, las actividades deportivas, las extraescolares y todas las experiencias positivas que trae consigo el nuevo ciclo escolar.

Por otro lado, si se trata de un niño que está iniciando la escolaridad en el nivel inicial, es fundamental que los padres tomen en cuenta ciertas acciones para facilitar la adaptación. Una de las estrategias claves es trabajar la anticipación, explicándoles el proceso paso a paso para que se sientan más seguros y preparados para esta nueva etapa.

“Los padres a veces sienten más ansiedad y temores al inicio de esta nueva etapa que los propios niños y es lo que les transmiten inconscientemente, cuando, por el contrario, deben proporcionarles confianza y seguridad”.

ADAPTACIÓN

Es importante considerar no solo los aspectos mencionados anteriormente, sino también que el proceso de adaptación varía en cada niño. Este proceso está estrechamente relacionado con el tipo de apego que tenga con sus padres y/o cuidadores primarios.

“Cuando hablamos de anticiparles los acontecimientos, nos referimos a explicarles con claridad a dónde van a ir, qué actividades realizarán, cuál es el propósito de hacerlo, cuánto tiempo estarán allí y en qué momento irán a recogerlos. Para los más pequeños, que aún no comprenden el concepto del tiempo en el reloj, es útil darles referencias concretas, como ‘después de la merienda’ o ‘cuando el sol esté más bajito’, para que se sientan más tranquilos”, explicó la neuropsicopedagoga.

Lo mismo aplica para los niños más grandes que enfrentan un cambio de colegio. Cada niño experimenta diferentes emociones al enfrentarse a una nueva etapa, por lo que es fundamental conversar con ellos y trabajar la anticipación, al igual que con los demás.

Otro aspecto clave es fomentar el diálogo diario. Crear espacios donde pueda expresar cómo se siente, ayuda a gestionar sus emociones y fortalecer la confianza en sus padres. Si bien estas conversaciones deberían formar parte de la rutina, resultan aún más esenciales en cualquier proceso de adaptación.

El regreso a clases es un proceso que requiere acompañamiento y paciencia. Cada niño experimenta la transición de manera diferente, por lo que es fundamental brindarles apoyo emocional, establecer rutinas graduales y fomentar el diálogo diario. La anticipación, tanto en los más pequeños como en los mayores, juega un papel clave para que se sientan seguros y preparados.

Al involucrarlos activamente en la organización del regreso a clases y equilibrar el uso de la tecnología con hábitos de aprendizaje, podemos hacer que este proceso sea más llevadero y positivo. Con comprensión, comunicación y una actitud flexible, los niños podrán adaptarse con mayor facilidad a su nueva rutina escolar.

Más contenido de esta sección