Los vecinos denuncian estar cansados de los violentos asaltos cometidos por los delincuentes motorizados, que no les dejan ni asomarse a la calle en horas de la noche.
La víctima, en esta ocasión, fue Andrea Bermejo, quien volvía a su vivienda luego de cumplir una larga jornada laboral.
A punto de llegar a su casa, la mujer fue abordada por dos motochorros en una motocicleta. Ella se dio cuenta que la amenazaban con arma de juguete y se enfrentó a sus agresores. Sin embargo, los malvivientes lograron llevarse su teléfono celular.
Los vecinos también acudieron a su pedido de auxilio y persiguieron a los delincuentes, pero estos escaparon.
El hecho quedó registrado en cámaras de seguridad de una vivienda y las imágenes son analizadas por la Policía Nacional para identificar a los autores.
relato. Andrea relató a NPY, que estaba caminando por una calle habitualmente oscura y silenciosa, que debe atravesar para llegar a su vivienda, cuando se percató de la extraña presencia de un hombre parado en una esquina, y que aparentemente actuaba de campana a los motochorros. “Al cruzar la esquina, le vi a uno primero que actuó de campana. Cuando le vi que actuaba de manera extraña, ya dije acá va pasar algo. Después caminé unos cuantos metros más y ya llegaron dos tipos en moto”, contó la mujer.
Al percatarse de que era amenazada con una pistola de juguete, la mujer enfrentó a los malvivientes mientras a gritos pedía auxilio. “Era obvio que era una pistola de juguete, por eso me enfrenté”, expresó.
A los empujones le echó al suelo a uno de los asaltantes y luego cayó encima de él. En un momento dado, su teléfono se cayó al suelo y esa ocasión fue aprovechada por el cómplice, que estaba al mando de la moto para llevar el celular. Ya en la huida de los delincuentes, los vecinos salieron de sus casas y ayudaron a la mujer, mientras otro perseguía en su camioneta a los motochorros.
“Yo gritaba para que alguien me ayude, porque por acá (esa zona) llega una hora y ya no hay nada, ni un alma ya no se ve por la calle”, indicó.
OTRO CASO. Una casa de juego de azar en Luque también fue objeto de asalto, por parte de motochorros que se hicieron pasar por clientes.
Luego, amenazaron y golpearon a la cajera para que entregue toda la recaudación. El hecho quedó grabado en el circuito cerrado. Tras una pronta reacción policial se logró detener a uno de los hombres y se recuperó. G. 2.500.000 del botín.