Un puño de zarzaparrilla, otro de cedrón, un pequeño mazo de agrial y un poco de kapi’i katî son extraídos de un montón por la vendedora de yuyos del Mercado 4 Carmen Amarilla, quien limpia las hierbas y las traslada a un mortero. Con paciencia, machaca y mezcla después las plantas medicinales para servirlas en un termo lleno de hielo. Luego, agrega yerba a la guampa y la remueve con una bombilla.
“Ya está, che memby”, le dice a uno de los asistentes de la segunda edición del Festival del Tereré, que se celebró ayer en el Paseo de los Yuyos del Mercado 4, sobre la calle República Francesa.
Con más de 20 tipos de remedios yuyos, combos antidengue, plantines de hierbas y hasta cócteles a base de plantas medicinales, los vendedores rindieron tributo a la tradicional bebida local.
CONSERVACIÓN. Los 40 vendedores apostados en el mercado buscan además preservar esta tradición que se extiende en toda la región, en países como Argentina o Brasil.
“Escuchamos que en Brasil se registró el nombre del tereré y sentimos pena por ello. Esto es algo realmente nuestro y vamos a seguir luchando por la tradición”, comentó Natalizia Ramírez, una de las fundadoras del paseo.
La vendedora se dedica al rubro de la venta de remedios refrescantes desde hace 40 años en el mismo sitio.
“Cuando llegué vine con mis hijos y ahora mis nietos ya venden remedios”, dijo, emocionada. Hoy, el presidente de la Comisión del Paseo es su nieto, Javier Torres, quien también vende remedios para el tereré, pero además busca innovaciones para el lugar, según comentó. “Queremos que la gente venga y no solo lleve los remedios, sino que pueda quedarse a tomar el tereré acá en el paseo”, relató.
Pohã ñana. La novedosa barra móvil del pohã ñana se presentó ayer, con mates, tereré y cócteles a base de remedios refrescantes para fiestas o eventos empresariales. El fundador, Romilio González, explicó que utiliza en sus productos katuava o burrito, que mezcla con cañas o licores. Pretende llevar el espacio a eventos familiares o empresariales.