Al concejal de Encarnación, Keiji Ishibashi, le consultaron en radio Monumental 1080 AM qué deja como lección para la Comuna el derrumbe de un edificio en el barrio San Roque, donde una mujer y su nieta murieron.
En ese sentido, Ishibashi comentó que hay una costumbre recurrente, sobre todo cuando se trata de un propietario particular, que es la de construir edificios por parte.
“Es algo que se hace, sobre todo, cuando se trata de propietario particular. Por ejemplo, tiene el dinero para construir dos pisos, pero ya manda a calcular una estructura para 10 pisos, supongamos. Entonces, hacen la estructura, hacen los cimientos como para aguantar eso, pero tienen el alcance solamente los primeros dos”, se explayó.
🔴 Concejal de Encarnación lamenta fatal derrumbe de edificio en construcción
— Monumental AM 1080 (@AM_1080) April 4, 2025
👉🏼 Keiji Ishibashi explicó que el edificio contaba con ocho pisos, de los cuales solamente siete estaban aprobados: "El octavo piso en cuestión es el que se encontró con una fiscalización aleatoria y… pic.twitter.com/dov2qNcIUF
Esto, a diferencia de los que hacen los grandes edificios que tienen las ventas en pozo y tienen que terminar todo el edificio de una vez.
“Ahora, eso no quiere decir que específicamente este sea el caso. Esto va a pasar por un peritaje técnico. Pero esa es una práctica, esto de construir edificios por etapas”, enfatizó.
Detalló que el proyecto del edificio que se derrumbó había recibido autorización para los primeros cinco pisos, mientras que los planos para los pisos adicionales se presentaron posteriormente.
“Normalmente uno asume, si hay un ingeniero o un calculista responsable, que el proyecto está correctamente elaborado. Es el octavo piso el que fue detectado mediante una fiscalización aleatoria y allí se le pidió que se regularice y se aplicó una multa”, expuso.
Ishibashi acotó que el octavo piso se regularizó luego con los planos firmados por profesionales.
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Respecto a los controles administrativos, sostuvo que el procedimiento seguido fue el habitual en estos casos, aunque dijo que la supervisión en proyectos privados puede ser menos rigurosa que en obras públicas.
“Para las obras públicas, es obligatorio contar con un libro de obra que debe reflejar la construcción efectiva. No estoy seguro si a nivel privado este requisito se cumplió", alegó y consideró que habría que verificar si lo que dice ese libro de obra se condice con lo que se construyó.
“Si el profesional que firma el plano no es quien ejecuta la obra, no sé si el libro de obra garantiza la calidad”, mencionó.
Pasadas las 22:30 del miércoles, se desplomó el edificio en construcción que se cobró la vida de Hermelinda Báez (55) y su nieta, Montserrat Brítez, de 15 años.