A pesar de que recientemente se realizaron trabajos de bacheo en esta vía de 170 kilómetros, ahora los conductores enfrentan el problema de la suciedad en ambos lados de la carretera, lo que reduce el ancho de la vía y dificulta el tránsito seguro.
Este inconveniente es visible en varias secciones del trayecto, y los usuarios exigen al MOPC que asuma su responsabilidad de mantener las banquinas limpias, evitando riesgos para quienes transitan por esta importante ruta de la región.
El bacheo parcial de esta vía fue realizada por una empresa privada, sin embargo, hacía Vallemí de vuelta ya se formaron los pozos. Aseguran que es por el peso excesivo de los vehículos que transportan cemento, cal agrícola y klinker. No hay control de peso en la zona.
En esta ruta se produjeron varios accidentes protagonizados por camiones de gran porte, que son los principales transportes que usar esta vía.
Esta ruta soporta diariamente carga muy pesada y el deterioro ha sido rápido porque tiene capa asfáltica, sino una mezcla denominada Tratamiento triple superficial. Actualmente, el Gobierno Nacional ha anunciado el recapado total con pavimento de hormigón. Este año se llamaría a licitación pública. JR