Freddy Cantero se desplazaba en compañía de su novia, su suegra, la tía de la novia y dos niños por la Ruta 3, General Elizardo Aquino. Volvían de Azotey, de un rezo, a Yby Yaú. Conducía a una velocidad de 120 km por hora, según él mismo admitió en radio Monumental AM.
En un momento dado, sintió como si le arrojaran piedras. Cuando olió algo quemado, detuvo la marcha y abrió la puerta de la camioneta. Allí sintió que una bala pasó sobre su cabeza y se percató de que, en realidad, estaba recibiendo disparos. Inmediatamente retomó la marcha. En el camino incluso llantó una rueda por un impacto de bala. “Corrí de ellos lo más que pude”, expresó.
Los ocupantes venían llorando del susto. La tía de su novia recibió un refilón de una bala que atravesó la camioneta Toyota tipo Hilux, mientras los demás salieron ilesos.
Por los rastros de bala en la camioneta, se trataría de un arma de grueso calibre. Cantero dijo que no tiene enemistad con nadie y desconoce si el ataque fue dirigido a dicho vehículo, por pertenecer a la estancia Guaraní.